Tohá confirmó que Venezuela se opuso a aterrizaje de vuelo de expulsión
Se trata de un avión que debía partir este viernes hasta Caracas, indicó la ministra del Interior.
"Vamos a hacer gestiones al más alto nivel diplomático para resolver este problema", garantizó.
La jefa de gabinete subrayó que "no podemos renunciar" a los esfuerzos para concretar expulsiones.
La ministra del Interior, Carolina Tohá, confirmó este jueves que el gobierno venezolano se negó a que un vuelo ocupado por compatriotas expulsados desde Chile aterrizara en ese país.
Después de que se informara la reanudación de estos operativos, la jefa de gabinete relevó que "el Gobierno de Chile ha hecho amplios y diversos esfuerzos para permitir que los procesos de expulsiones se lleven adelante".
"Lamentablemente, este vuelo que tenía que partir mañana a Venezuela no fue autorizado, razón por la cual vamos a hacer gestiones al más alto nivel diplomático para resolver este problema. Es algo en lo que no podemos renunciar y en lo que vamos a persistir", comprometió.
Tohá recalcó que ambas naciones tienen un acuerdo en la materia, "que es importante que se cumpla; si hay alguna dificultad es importante que se resuelva, pero que entre ambos países prime aquello en lo que hemos avanzado al retomar la relación, que es un primer paso, y que sigamos adelante".
Horas antes, el exsubsecretario del Interior Rodrigo Ubilla (RN) planteó en Cooperativa que "Venezuela no se puede oponer a aterrizar un vuelo comercial", y que tales viajes se pueden financiar con los recursos asociados al ingreso regular de migrantes.
Diputados de oposición ya critican el desempeño del embajador de Chile en Caracas, Jaime Gazmuri, quien fue nombrado hace seis meses con el fin de restablecer el flujo migratorio, mas esos diálogos -afirman- no han dado resultados concretos.
En esa línea, la parlamentario e integrante de la Comisión de Relaciones Exteriores, Catalina Del Real (RN), apuntó que "llamaremos al embajador de Chile en Venezuela para que se presente ante la Comisión de RREE y ver de qué manera solucionamos este asunto".
"No estamos para botar recursos a la basura. Esto demuestra la ineficacia del Gobierno, que operó probablemente sin las conversaciones previas para que en Venezuela reciban a sus propios ciudadanos", sostuvo.
La legislación chilena indica que si no se expulsa a los extranjeros nominados en un plazo de cinco días, quedarán en libertad.