Cierra el último quiosco clásico de prensa de Bruselas
En Bélgica han ido decayendo por el cambio en los hábitos de lectura, el auge de los medios digitales y los estragos económicos de la pandemia.
Paul, el propietario, decidió jubilarse después de 38 años vendiendo periódicos.
Cada vez hay más centros comerciales en Bruselas, en desmedro de los quioscos locales.
El último quiosco clásico de periódicos de la ciudad de Bruselas, en Bélgica, cerró de forma definitiva el día de ayer, debido a la jubilación de su propietario y el cambio de tendencias a la hora de leer y comprar prensa, según destacaron los diarios belgas.
Paul, el propietario del quiosco, se jubila este primer lunes de 2024 después de cerca de 38 años de servicio, por lo que el último quiosco de prensa de la capital belga situado en la Avenida Louise -una concurrida calle de comercios y tiendas-, cierra sus puertas definitivamente.
"No estoy triste, lo vi venir", afirmó el último quiosquero bruselense sobre el hecho de no haber encontrado sustituto, ya que los ingresos de su negocio cayeron "en picada desde el Covid-19", explicó en declaraciones para 'L-Post'.
La clausura del establecimiento se ha visto también afectada por el proyecto de renovación de esa avenida y de la calle Toison d'Or que, operado por el Servicio Público Regional de Bruselas de Movilidad, prevé la reconstrucción total del pavimento.
El proyecto cambiará por completo el aspecto de la zona, a fin de crear un nuevo espacio público de alta calidad que anime a los transeúntes a visitar restaurantes y comercios locales.
Aunque el futuro diseño de la avenida contempla nuevos espacios para quioscos, deberán de ser solicitados por los interesados y está por verse si serán de prensa o de otros productos, como alimentación o floristería, tal y como recogió el medio local Bruzz.
"A este lugar le vendría muy bien un quiosco de periódicos (...). La mayoría de las librerías de la zona se han mudado porque los alquileres de los locales comerciales aquí son muy altos", explicó a 'De Standaard' Thierry, empleado del quiosco de Paul.