Policías y militares de Ecuador intervienen cárcel de la que se fugó "Fito"
Semidesnudos, los presos fueron inmovilizados en uno de los patios con el objetivo de realizar un exhaustivo registro a las celdas en busca de armas y objetos prohibidos.
José Adolfo Macías Villamar, el líder de la banda criminal "Los Choneros", sigue prófugo.
Un numeroso contingente de policías y militares ingresó este jueves a la Cárcel Regional de Guayaquil, la misma de donde semanas atrás se escapó José Adolfo Macías Villamar "Fito", el líder de la banda criminal "Los Choneros".
Durante la intervención los uniformados inmovilizaron a los presos semidesnudos en uno de los patios con el objetivo de realizar un exhaustivo registro a las celdas en busca de armas y objetos prohibidos, tal y como las fuerzas del orden hicieron días atrás en otras cárceles donde se registraron motines con unos 200 rehenes ya liberados.
Los efectivos hicieron a los reclusos cantar el himno nacional frente a una banda ecuatoriana colgada desde la parte alta del pabellón intervenido, según se aprecia en las imágenes difundidas en redes sociales por el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.
#Guayas
— FFAAECUADOR.. (@FFAAECUADOR) January 18, 2024
Intervención en la #PenitenciaríadelLitoral
El #BloqueDeSeguridad, @FFAAECUADOR y @PoliciaEcuador ingresaron al CRS del Guayas controlando el perímetro externo e interno del centro penitenciario.
Noticia en desarrollo... pic.twitter.com/CnYOXi5qdT
#Guayas
— FFAAECUADOR.. (@FFAAECUADOR) January 18, 2024
La bandera nacional flameo altiva y soberana, en el Centro de Rehabilitación Social de #Guayas.#FFAAContigo 🇪🇨#𝐁𝐥𝐨𝐪𝐮𝐞𝐃𝐞𝐒𝐞𝐠𝐮𝐫𝐢𝐝𝐚𝐝#UnSoloEcuadorUnaSolaFuerza pic.twitter.com/uu1W1n0ch8
En las anteriores intervenciones carcelarias realizadas por las autoridades desde el inicio de la "guerra interna" declarada por el Gobierno contra las bandas del crimen organizado se hallaron numerosas armas de fuego, armas blancas, chalecos antibalas y granadas, entre otros artículos prohibidos.
Similares requisas hechas el año pasado dieron cuenta de que las bandas criminales, que tienen el control interno de numerosas cárceles, poseían auténticos arsenales de guerra con fusiles de asalto, como sucedió en el caso de la Penitenciaría del Litoral, la cárcel más grande y poblada de Ecuador, contigua a la Cárcel Regional de Guayaquil.