"Incluir, no dividir": Francisco defendió bendición a parejas homosexuales
"El Evangelio es para santificar a todos", defendió la máxima autoridad cristiana.
Además, indicó que los opositores a la declaración "pertenecen a pequeños grupos ideológicos".
Desde El Vaticano se mostró sereno, confiando en que "gradualmente todos se tranquilicen sobre el espíritu de la declaración Fiducia Supplicans".
El Papa Francisco aseguró que, pese a las protestas de "pequeños grupos ideológicos", con la reciente aprobación de la bendición a las parejas homosexuales o en situación de irregularidad para la Iglesia lo que se pretende es "incluir, no dividir" porque "el Evangelio es para santificar a todos".
"Me preguntan por qué. Yo respondo: el Evangelio es para santificar a todos. Claro, siempre y cuando haya buena voluntad", dijo este lunes en una entrevista con el diario italiano La Stampa sobre la declaración 'Fiducia supplicans', que autoriza la bendición de parejas homosexuales o divorciados vueltos a casar.
"Y hay que dar instrucciones precisas sobre la vida cristiana (subrayo que no se bendice la unión, sino a las personas). Pero todos somos pecadores: ¿por qué entonces hacer una lista de los pecadores que pueden entrar en la Iglesia y una lista de los pecadores que no pueden permanecer en la Iglesia? Esto no es Evangelio", añadió.
El Papa subrayó que "quien protesta con vehemencia pertenece a pequeños grupos ideológicos" y que "un caso aparte es el de los africanos: para ellos la homosexualidad es algo 'malo' culturalmente, no la toleran".
Asimismo, la máxima autoridad cristiana señaló no temer a un posible cisma, ya que "siempre en la Iglesia ha habido grupitos que manifestaban reflexiones de color cismático (separatista). Hay que dejarlos hacer y pasar, y mirar hacia adelante".
Por lo tanto, "confío en que gradualmente todos se tranquilicen sobre el espíritu de la declaración Fiducia Supplicans del Dicasterio para la doctrina de la fe: quiere incluir, no dividir. Invita a acoger y después confiar a las personas, y confiar en Dios", agregó.
Y sobre los rumores de una posible dimisión por su estado de salud, asegura que no le molestan, porque "es una posibilidad para todo pontífice".
"Pero ahora no pienso en ello. No me inquieta. Cuando no pueda más, empezaré eventualmente a pensarlo. Y a rezar por nosotros", concluyó.