Justicia haitiana acusa a viuda de ser cómplice del magnicidio de expresidente
Jovenel Moïse fue torturado y asesinado en 2021 por un grupo de mercenarios, ataque en el que su esposa, Martine, resultó herida.
Según el juez Walther Voltaire, sus declaraciones "están tan plagadas de contradicciones que la desacreditan".
El magistrado Voltaire resolvió imputar a medio centenar de personas por este crimen, que ya tiene cinco condenados en Estados Unidos, donde se fraguó.
La justicia haitiana acusó este lunes a Martine Moïse, viuda del asesinado presidente Jovenel Moïse, de complicidad y asociación criminal para cometer el magnicidio, ocurrido en 2021.
Según un informe judicial al que tuvo acceso la agencia EFE -del que ya habían trascendido algunos antecedentes-, junto con la viuda fueron imputadas otras 50 personas, entre ellas 17 colombianos y también el exprimer ministro de Haiti Claude Joseph y el exjefe de la Policía Nacional Léon Charles, quien hoy se desempeña como representante permanente de su país ante la Organización de los Estados Americanos (OEA).
Joseph afronta los mismos cargos de Martine Moïse, mientras que Charles los de asesinato, tentativa de asesinato, posesión y porte ilegal de armas, conspiración contra la seguridad interna del Estado y asociación para delinquir.
"Existen cargos concordantes y pruebas suficientes para justificar su responsabilidad en los hechos que se les imputan", según la resolución del juez Walther Voltaire, que remite a los acusados "al Tribunal Penal (...) para ser juzgados por asociación para delinquir, robo a mano armada, terrorismo, asesinato y complicidad en asesinato, delitos cometidos en perjuicio de Jovenel Moise".
En cuanto a la viuda del exmandatario, sus declaraciones sobre el asesinato "están tan plagadas de contradicciones que dejan mucho que desear y la desacreditan", señala el magistrado, cuyo escrito, de 122 páginas, fue enviado a la Fiscalía.
El próximo paso será que el presidente del Tribunal Supremo haitiano organice un juicio.
CRIMEN TRASNACIONAL
Moise fue torturado y asesinado el 7 de julio de 2021 en su residencia de Puerto Príncipe por un grupo de mercenarios, en su mayoría colombianos.
En el ataque resultó herida su esposa, que ese mismo día fue trasladada a Miami.
Por este caso ya hay cinco personas declaradas culpables ante la justicia de Estados Unidos, donde se planificó y financió el complot.