Indap reparará sistemas de riego de comunidades pehuenches en La Araucanía
El proyecto implica una inversión de 180 millones de pesos que beneficiará directamente a 164 familias de la zona.
El Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap) anunció una inversión de 180 millones de pesos para reparar los sistemas de riego de las comunidades pehuenches de Lonquimay, en la Región de La Araucanía.
El proyecto beneficiará a 164 familias agricultoras con la reparación de ocho proyectos asociativos que tienen entre 15 y 20 años de uso, ubicados en los sectores de Pedregoso, Pehuenco, Marimenuco y Cruzaco.
Las obras contemplan arreglos en las bocatomas ubicadas en ríos o esteros -desde donde el agua se trastada de manera gravitacional para el riego, principalmente de praderas de alfalfa- e incluyen cambio de hidrantes, válvulas de alivio y reposición de las matrices rotas.
El director de Indap Araucanía, Pablo González, dijo que esta iniciativa cumple con un compromiso adquirido por el Presidente Gabriel Boric cuando en noviembre de 2022 se reunió con dirigentes y comunidades de la zona que le plantearon sus problemas. "Con los recursos que vamos a invertir a través del Programa de Obras Menores de Riego (PROM), estas 164 familias podrán volver a regar, beneficiando con ello las praderas que tanto necesitan sus animales", expresó.
El director nacional de Indap, Santiago Rojas, resaltó el impulso que La Araucanía le está dando a la creación de faros agroecológicos, predios demostrativos que a través de la entrega de conocimientos y prácticas, van mostrando a las y los agricultores el camino para producir alimentos sin uso de agroquímicos, con cuidado por el medioambiente y adaptándose al cambio climático, un modelo que Indap está promoviendo a nivel nacional para avanzar hacia una agricultura más limpia.
Actualmente la región cuenta con 32 de estos faros, los que a través de programas de capacitación, asesoría técnica y extensión brindan apoyo a las comunidades interesadas en adoptar modelos de producción más sustentables, además de funcionar como lugares de encuentro y articulación entre diversos actores del sector agrícola. La meta es cerrar este año con más de 80 faros.
"Ante la crisis climática que vivimos es fundamental transitar hacia una agricultura más sostenible, inclusiva y resiliente, y los faros son una herramienta para avanzar en esa senda. En Lonquimay encontramos prácticas agroecológicas bien arraigadas y que se han transmitido de generación en generación", apuntó Rojas.