Confesiones religiosas llaman a un acuerdo nacional, "por amor a Chile"
"Un malestar muy generalizado recorre las distintas instancias de la vida nacional", declaran.
A través de una declaración pública, varias confesiones religiosas locales expresaron su profunda preocupación por el deterioro de las relaciones cívicas, el aumento de la inseguridad, la corrupción y la incapacidad de los actores políticos para llegar a acuerdos.
Representantes de los mundos católico, ortodoxo, anglicano, evangélico, judío e islámico dijeron buscar contribuir "a la paz, al desarrollo armónico de nuestra convivencia nacional y desde la perspectiva ética que nos corresponde".
Se observa un "grave deterioro que se ha producido desde hace algunos años en nuestras relaciones cívicas, que afectan seriamente la capacidad de buscar soluciones justas y oportunas a las dificultades que enfrentamos", con "un malestar muy generalizado recorre las distintas instancias de la vida nacional", que hace difícil "la comprensión y el diálogo, elementos esenciales de una verdadera democracia".
En particular, mencionan el "grave problema de inseguridad", porque "la expansión de la droga y la presencia del crimen organizado, no conocido en Chile, está destruyendo los elementos esenciales de la vida ciudadana y en particular nuestros barrios, familias y nuestra juventud".
Sobre la corrupción, apuntan que "innumerables casos han afectado de manera transversal a diversas instancias públicas y privada"; añadiendo que la incapacidad de los actores políticos para llegar a acuerdos tiene "efectos desintegradores para la convivencia cívica y el progreso".
Chile "requiere dar un paso decisivo hacia una verdadera política de acuerdos y consenso", es decir "un acuerdo nacional", para "resolver los graves problemas sociales, económicos y políticos que enfrentamos".
Es una invitación, declaran, "sin tener por delante otro norte que el amor a Chile, la casa común y la patria que el creador nos ha regalado, donde hay un lugar para cada uno y donde todos tenemos una misión y un camino".
La declaración fue firmada por:
- Fernando Chomalí, arzobispo de Santiago y presidente de la Conferencia Episcopal de Chile
- Sergio Abad, arzobispo ortodoxo de Chile
- Héctor Zavala, arzobispo primado de la Iglesia Anglicana en Chile
- Emiliano Soto, representante protocolar de las Iglesias Evangélicas ante el Estado
- Héctor Cancino, presidente de la Plataforma Evangélica Nacional
- Sergio Velozo, obispo presidente de la Unión de Iglesias Pentecostales de Chile
- Francisco Rivera, obispo director de la Comisión Legal Evangélica
- Eduardo Cid, obispo vicepresidente de la Mesa Ampliada UNE-Chile
- Eduardo Waigortin, rabino presidente de la Comunidad Judía de Chile
- Samuel Szeinhendler, rabino Presidente de la Confraternidad Judeo-Cristiana de Chile
- Fuad Musa, presidente del Centro de Cultura Islámica de Chile