Justicia estadounidense desestimó todos los cargos contra Alex Saab
En diciembre pasado, el presidente Joe Biden liberó al empresario colombiano, aliado del líder de Venezuela, Nicolás Maduro.
El acusado por lavado de dinero también era requerido por enriquecimiento ilícito, exportaciones e importaciones ficticias y estafa en su país.
Saab salió en libertad en un intercambio de prisioneros con Venezuela, que a su vez excarceló a diez estadounidenses y a cerca de una veintena de "presos políticos".
La Justicia estadounidense desestimó de manera definitiva todos los cargos que pesaban sobre el empresario colombiano Alex Saab, aliado del presidente venezolano, Nicolás Maduro, y quien fue puesto en libertad en diciembre de 2023.
Según consta en una moción con fecha del jueves e ingresada hoy en la corte, el magistrado federal Robert Scola concedió la desestimación de todos los cargos que pesaban contra Saab, tras el perdón presidencial que el pasado 15 de diciembre firmó a su favor el mandatario, Joe Biden.
Saab, que estaba acusado, entre otros cargos, de lavado de dinero, salió en libertad ese mes en un intercambio de prisioneros con Venezuela, que a su vez excarceló a diez estadounidenses y a cerca de una veintena de venezolanos considerados "presos políticos".
El empresario fue detenido el 12 de junio de 2020 en Cabo Verde tras una petición estadounidense a través de Interpol por supuesto blanqueo de dinero, tras lo que Caracas señaló que Saab fue nombrado en 2018 enviado especial para realizar misiones oficiales en Irán.
Posteriormente fue extraditado a EEUU, acusado de conspiración para lavado de dinero. También era buscado por las autoridades de Colombia por concertarse para delinquir, enriquecimiento ilícito, exportaciones e importaciones ficticias y estafa agravada.
El mismo día de su liberación, y tras la llegada a Caracas, el empresario fue recibido con abrazos en el palacio presidencial de Miraflores, sede del Ejecutivo venezolano, por Maduro, quien lo calificó como "un hombre valiente y patriota".
Un mes después, Maduro nombró a Saab presidente del Centro Internacional de Inversión Productiva (CIIP) del país, creado en 2020 con el objetivo de atraer capitales locales y extranjeros que impulsen la economía nacional, así como para el "registro, estudio y seguimiento" de las sanciones impuestas a la economía de Venezuela.