Joaquín Álvarez, el futuro de la gimnasia chilena que ya tiene un movimiento con su nombre
El deportista nacional de 20 años fue inmortalizado gracias a una compleja maniobra en las paralelas.
Un complicado doble extendido de salida en la punta en barras paralelas para el código de la Federación Internacional de Gimnasia (FIG) se conoce ya como un 'Álvarez' para cualquier atleta que lo ejecute.
Es obra y ha quedado plasmado para la posteridad con su nombre por un chileno de 20 años, Joaquín Álvarez, al que le llevó apenas dos meses prepararlo y que estableció en el primer intento, tal como contó en entrevista con la Agencia EFE.
"El año pasado tuve una medalla sudamericana, entonces ahora estamos hablando de escalar al siguiente paso", aseguró Joaquín, quien sonríe cuando evoca la primera vez que sintió que había logrado la salida con doble extendido y recuerda que pensó "parece que voy a tener mi propio elemento".
El gimnasta comenzó a entrenarlo en noviembre de 2023 y tres meses después, en febrero pasado, lo presentó en la Copa del Mundo de Aparatos de Gimnasia Artística en El Cairo, Egipto.
"Fue como recién en enero cuando sentí una sensación muy distinta a la anterior que había hecho, como que salió sola, caí perfecto. Fue como que esta es la sensación que tengo que sentir para hacerla bien, el indicador de que salió. Y luego cada vez que intentaba repetirla buscaba esa sensación", explicó.
Al momento de ejecutarla en competencia fue en lo que pensó "lo mejor que puedes hacer es dejar al cuerpo hacer lo que sabe, que la mente interfiera lo menos posible. Entonces ya había practicado mi salida, ya sabía que me salía bien, lo único que podía hacer era dejarme fluir".
Alvarez se unió a Tomás González, otro gimnasta chileno a quien la FIG le reconoció en 2018 su salto mortal triple con giro y medio con su nombre a los 33 años: "Es como un objetivo, un sueño de muchos gimnastas tener su elemento, un legado que queda en el código, en el deporte que tanto amas", expresó.
Para lograrlo debió practicar dos series de paralelas en simultáneo, la principal de mayor dificultad cuya salida era un doble carpado y otra de menor exigencia con la salida extendida que es más complicada. Su plan ahora es consolidar una sola serie con las dos dificultades.
"Fue todo muy deprisa y por lo mismo aún falta mejorarla. Me gustaría algún día hacerla completamente perfecta, que no hayan descuentos, no haya duda de nada, de nada", dijo Joaquín quien había visto videos de la gimnasta estadounidense Simone Biles practicando uno de los dos elementos que tiene en el FIG.