Michael Clark y un estadio para la U: Lo mejor es trabajar en silencio, con la boca cerrada
"Son proyectos que no son fáciles, de gran envergadura. Jugar con eso no se va a hacer", dijo.
Luego de ser ratificado como presidente de Azul Azul, Michael Clark abordó el sueño de construir un estadio para Universidad de Chile, con cautela respecto a dar detalles demasiado preliminares sobre el tema.
"Como dije en la junta, es un tema que por su importancia, y salvaguardando el patrimonio del club, lo mejor es trabajar en silencio, de manera profesional, con la boca cerrada y comentar cuando haya que comentar. Mientras eso no suceda, vamos a mantenernos como vamos hasta ahora", señaló a la prensa.
"Nosotros estamos trabajando arduamente para que el club tenga una mejor infraestructura deportiva. Los detalles, no está en los mejores intereses del club que se hagan públicos, además en un momento como este que no es sencillo. Hay que analizar varias problemáticas", sumó.
"Más allá que otros clubes avancen con sus estadios, yo creo que para el club es una prioridad (avanzar), en el sentido de que si bien siempre ha sido un anhelo histórico que tengamos nuestro propio estadio, es conceptual".
Clark destacó que "la U se siente muy cómoda jugando en Ñuñoa, en un estadio donde obtuvo todas sus cosas importantes. Un estadio muy cómodo con cuatro accesos, con el metro en la puerta y vías importantes, etc".
Sin embargo, puntualizó que "en los últimos años cada vez es más difícil hacer partidos en el estadio (Nacional), porque es una estructura pública y mucha gente quiere ocuparlo.
El dirigente expresó que tener estadio "pasó de ser algo deseado a ser algo realmente básico para asegurar la continuidad operacional y ejercer la localía, que es muy importante.
"No es casualidad la performance en cancha que ha tenido la U al no jugar en Ñuñoa. El hecho de jugar donde te sientas local importa mucho. En ese sentido, claramente es un tema sensible y es prioritario avanzar", continuó.
"Son proyectos que no son fáciles, de gran envergadura. Involucran a la comunidad, sacar permisos, conseguir terrenos. Uno puede pensar que está cerca y se cae, como ha pasado. Jugar con eso no se va a hacer", complementó, remarcando su postura de mantener silencio hasta tener algo cerrado.