Hizbulá prometió venganza contra Israel por "ataque terrorista" mediante beepers
El Estado judío es apuntado como responsable de la explosión simultánea y masiva de estos artefactos en Líbano y Siria, con un resultado de nueve muertos y miles de heridos.
"Lo que ocurrió nos llenará de voluntad e insistencia en seguir el camino de la resistencia y lucha", dijo el grupo chiíta.
La Unión Europeo condenó el incidente por "poner en peligro la seguridad de Líbano y aumentar el riesgo de escalada en la región".
El grupo chiíta libanés Hizbulá prometió este miércoles que dará una respuesta "específica" a la "masacre israelí" causada entre sus filas por la explosión simultánea y masiva de miles de beepers en manos de sus miembros en el Líbano y Siria, que dejó al menos nueve muertos y miles de heridos de diversa gravedad.
En un mensaje emitido esta mañana, la formación armada señaló que pese al ataque recibido continuará con su apoyo a la "resistencia de Gaza y su pueblo" y seguirá defendiendo "el Líbano, su pueblo y su soberanía".
El grupo añadió que la "masacre" del martes tendrá un "duro castigo" y "una rendición de cuentas específica".
"Lo que ocurrió ayer nos llenará de voluntad e insistencia en seguir el camino de la resistencia y lucha y confiamos totalmente en la promesa divina con la victoria de los fieles combatientes pacientes", afirmó la formación en la nota.
Hizbulá también expresó sus "más sinceras bendiciones y condolencias" a las familias de los asesinados y los heridos "en el ataque traidor".
"Un acto terrorista y un asesinato en masa"
Ya ayer por la noche tanto Hizbulá como el Ministerio de Exteriores del Líbano atribuyeron individualmente a Israel la explosión masiva de los beepers, lo que consideraron una "agresión criminal que también tuvo como objetivo a civiles y que mató a varias personas".
"Esta escalada israelí grave y deliberada coincide con amenazas israelíes de ampliar la guerra hacia el Líbano y con su postura intransigente que llama a más derramamiento de sangre, destrucción y sabotaje", denunció el Gobierno libanés en una nota.
Sobre las 15.30 del martes (12.30 GMT), miles de beepers en manos de miembros de Hizbulá explotaron simultáneamente en varios puntos del Líbano, principalmente en el sur del país y los suburbios meridionales de Beirut, controlados por la formación chií.
Irán también consideró este miércoles el ataque como "un acto terrorista y un asesinato en masa" la explosión simultánea de dichos aparatos.
Borrell alerta del riesgo de escalada en Oriente Medio
El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, condenó este miércoles las explosiones de beepers de miembros del grupo libanés Hizbulá por "poner en peligro la seguridad de Líbano y aumentar el riesgo de escalada en la región".
En un comunicado, el jefe de la diplomacia europea pidió a todos los actores que eviten una "guerra total, que tendría graves consecuencias para toda la región y más allá" y afirmó que "a pesar de que los ataques parecen haberse dirigido contra objetivos concretos, tuvieron daños colaterales indiscriminados contra civiles, incluidos niños".
El ministro libanés de Salud Pública, Firas Abiad, explicó que la mayoría de los pacientes sufrieron heridas en la cara o las manos, con quemaduras que obligaron a realizar reanimación cardiopulmonar a los pacientes, con "muchos" casos de amputaciones.
El ataque de ayer llevó a la aerolínea alemana Lufthansa a cancelar todos vuelos con aterrizaje o despegue en Tel Aviv o Teherán por lo menos a lo largo de todo el día de hoy.