Schoenstatt detectó a ocho abusadores sexuales entre sus sacerdotes en Chile
Los religiosos fueron identificados en una investigación histórica y jurídica de la comunidad religiosa, desde su fundación en 1965 hasta el presente.
El instituto evacuó un informe que también da cuenta de 28 víctimas, con el fin de "reconocer con humildad los errores cometidos".
El instituto emprendió una radiografía histórica para "acercarnos lo más posible a toda la verdad", incluyendo protocolos que "no siempre fueron los más adecuados".
Después de una investigación histórica y jurídica que se prolongó por más de dos años, el Instituto Secular Padres de Schoenstatt en Chile publicó un informe que identifica a 28 víctimas y ocho sacerdotes de esa comunidad católica que han cometido abusos.
Mediante un video, el superior provincial del instituto, padre Diogo Barata, abordó el contenido del texto "Purificación de la Memoria 1965-2024", e indicó que el propósito de la investigación es "poder acercarnos lo más posible a toda la verdad sobre los hechos ocurridos y sobre los procedimientos de la comunidad, que no siempre fueron los más adecuados".
"El objetivo de este informe es reconocer públicamente los abusos cometidos, pedir perdón a las víctimas, y al mismo tiempo, manifestar un compromiso con la reparación y la prevención", manifestó, pues el texto también detalla las acciones que han ejecutado para prevenir futuros abusos, a través de la Comisión de Prevención y Acompañamiento.
El religioso reafirmó que "reconocemos con humildad los errores cometidos, desde la falta de prevención y el insuficiente apoyo a las víctimas, hasta la falta de celeridad en los procesos de investigación y reparación".
"Y como se lee en la parábola del samaritano, lo decimos con vergüenza: fuimos como esos sacerdotes que pasaron por el camino y pasaron de largo sin darse cuenta de que la víctima estaba allí", admitió Barata, insistiendo en ofrecer disculpas a los afectados y reiterar su compromiso "con la verdad, la transparencia, la reparación y la prevención".
El documento comienza con las palabras del padre, que tras agradecer a los afectados y a sus cercanos, profundiza que "no fue hasta que abrimos nuestros oídos y nuestro corazón, escuchando con toda la atención que merecían las víctimas, que comenzamos a ver la magnitud del dolor causado. Fue un camino de crecimiento lento en el cual cometimos errores, y tuvimos muchas fallas que aumentaron todavía más el dolor de las víctimas".
LOS NOMBRES DE LOS ABUSADORES
Estos son los nombres revelados por el informe, dos de ellos por primera vez, y todos correspondientes a religiosos que estuvieron o permanecen bajo supervisión del instituto tras ser investigados:
- Francisco José Cox Huneeus, exarzobispo y líder de Schoenstatt expulsado del estado clerical en 2018 y fallecido en 2020. Denunciado por abusar sexualmente de cinco personas a fines de los años 60 y principios de la década del 2000. En sus últimos años fue investigado penalmente.
- Marcial Parada Cardemil, sacerdote activo desde 1961 y dispensado del estado clerical en 2021. Denunciado por abusar sexualmente de 10 personas entre los años 70 y 90, e investigado por la Fiscalía.
- Luis Morel Gumucio, sacerdote entre 1968 y 2012, cuando se decretó la prohibición del ejercicio en su contra, y fallecido en 2015. Sentenciado por la diócesis por el abuso sexual de un menor de edad durante los años 70. El documento de Schoenstatt informa del caso por primera vez.
- Ángel Cerró Udis, sacerdote entre 1964 y 2021, cuando se decretó la prohibición del ejercicio en su contra. Denunciado por abusar de seis personas entre los años 80 y la década del 2010. Todavía es investigado en sede diocesal.
- Francisco Basañez Méndez, sacerdote desde 1997 y apartado de toda actividad pastoral entre 2015 y 2020, aunque no ha sido autorizado a retomar su ocupación. La sanción respondió a dos denuncias de abuso sexual contra adultos, y varias de abuso de autoridad contra menores de edad en la década del 2000.
- Rodrigo Gajardo Figueroa, sacerdote desde 2005 y apartado de sus funciones entre 2020 y 2023, aunque no ha sido autorizado a retomar su ocupación. Sancionado en sede civil en 2017 por abuso sexual de un adolescente de 14 años, por lo que se le prohibió a perpetuidad entrar en contacto con menores.
- Bernardo Parra Sepúlveda, sacerdote desde 1999 y apartado de sus funciones entre 2021 y 2022, aunque no ha sido autorizado a retomar su ocupación. Un proceso administrativo penal lo declaró culpable de conductas negligentes sin dolo contra novicios: un caso de connotación sexual sin contacto, y varios de abuso de autoridad.
- Raúl Feres Shalup, sacerdote desde 1960 y actualmente ejerciendo de forma puntual, siempre y cuando sea autorizado por su superior de casa. Dos investigaciones previas (2019 y 2024) concluyeron que incurrió en comportamientos inapropiados con una mujer adulta entre 2012 y 2019. El documento de Schoenstatt informa del caso por primera vez.