El gigante asiático construye una central hidroeléctrica que utiliza energía para bombear agua a un lugar más alto con el fin de almacenarla.
La provincia noroccidental china de Qinghai inició la construcción de una central eléctrica de almacenamiento por bombeo con una capacidad máxima de unos 20 millones de kWh, marcando otro proyecto clave en el oeste de China, una región rica en recursos de energía limpia.
Las obras se iniciaron en agosto y se trata de una central hidroeléctrica que utiliza energía para bombear agua a un lugar más alto con el fin de almacenarla. Luego se puede liberar de forma controlada cuando el suministro de energía es insuficiente.
Con una inversión total de casi 16.000 millones de yuanes (alrededor de 2.240 millones de dólares), se espera que el proyecto en el distrito de Guinan de Qinghai se convierta en la central eléctrica de almacenamiento por bombeo con la mayor capacidad instalada en el oeste de China.
La capacidad instalada total de la nueva estación puede alcanzar los 2,8 millones de kilovatios. Cuando entre en funcionamiento, se estima que ayudará a reducir el consumo estándar de carbón en aproximadamente 1,82 millones de toneladas y reducirá las emisiones de dióxido de carbono en aproximadamente 4,55 millones de toneladas por año.
Qinghai espera que su capacidad instalada de nuevas energías supere los 100 millones de kilovatios para 2030.
