"Prevenir la enfermedad antes de que se manifieste e impedir la variación de la enfermedad cuando uno la adolece" es un principio de la medicina tradicional china.
Poner la prevención en primer lugar" es la directriz de la labor sanitaria en nuestro país. "Prevenir la enfermedad antes de que se manifieste e impedir la variación de la enfermedad cuando uno la adolece" es un principio de la medicina tradicional china.
Durante los años del Estado Wei (403-225 a. C.) había un prestigioso médico llamado Bian Que, quien tenía dos hermanos mayores. Los tres eran médicos. Una vez, el marqués Wen le preguntó a Bian Que: "Tú y tus dos hermanos son médicos de buenas habilidades, pero ¿quién es el mejor?".
"Mi hermano mayor es el mejor. A él le sigue mi segundo hermano. Yo soy el peor", contestó Bian Que.
"¿Pero entonces por qué tienes tú la mayor reputación?", insistió el marqués, a lo que Bian Que respondió: "Mi hermano mayor trata la enfermedad antes de que ocurra, por lo que la mayoría de la gente no sabe que él tiene la capacidad de erradicar el mal de antemano, así que su reputación no ha sido bien difundida. Mi segundo hermano cura el mal al comienzo de la enfermedad, así que la gente piensa que solo puede tratar pequeñas dolencias, por lo que su reputación solo se limita al campo. Sin embargo, yo trato las enfermedades cuando la situación ya es grave, con tratamientos de sangría y aplicación de medicamentos, por lo que pareciese que soy yo el más ocupado. Es por esta razón que la gente cree que tengo mejores habilidades y mi reputación se ha extendido por todo el mundo", explicó Bian Que.
"Tienes toda la razón", consintió el marqués Wen.
Cada uno de los tres hermanos tenía su propia habilidad, así que costaba calificar quién era el mejor. Sin embargo, una enfermedad se desarrolla gradualmente, pasa de ser leve a grave. Si puede ser prevenida o tratada con anticipación, su impacto podrá ser minimizado, por lo que Bian Que señaló que sus dos hermanos mayores contaban con mejores habilidades médicas. De acuerdo con el libro Huangdi Neijing (Canon Interno del Emperador Amarillo), el cual es la fuente doctrinal de la medicina tradicional china desde hace más de dos milenios, "un buen médico trata las enfermedades cuando aún no han ocurrido". He ahí donde radica su alto nivel de habilidades.
Para prevenir una enfermedad, uno debe saber primero cuáles son sus causas. Según la medicina tradicional china, la formación y el desarrollo de una enfermedad principalmente se deben a la oposición entre la vitalidad y la patogenia.
La vitalidad se refiere al estado de salud y la resistencia corporal contra las enfermedades, a saber, la fortaleza y la debilidad del cuerpo, mientras que la patogenia indica una serie de factores que fácilmente conducen a las dolencias, tales como el clima, la alimentación, las emociones, etc. Es decir, solo cuando el cuerpo cuenta con una buena resistencia, podrá tener la capacidad de enfrentar las enfermedades. "Cuanta más vitalidad mantenga, más resistencia tendrá para confrontar la patogenia", reza un refrán chino.
De acuerdo con un dicho popular, "un sachet lleno de medicinas tradicionales chinas ayuda a no temer a los insectos dañinos". Llevar un sachet lleno de medicinas tradicionales chinas no es solo una costumbre popular, sino que también es considerada una forma de prevenir plagas, por lo que es una característica importante dentro de la medicina tradicional china en cuanto al tratamiento de enfermedades. Las medicinas tradicionales chinas incluidas en ese sachet son principalmente aromáticas y cuentan con sustancias volátiles que alejan a los insectos dañinos, permiten refrescarse y –según dice la tradición– nos protegen contra los malos espíritus.
