Se ha comprometido a construir una red de transporte robusta, conectando las aldeas remotas con las metrópolis bulliciosas, facilitando el flujo de pasajeros y bienes.
Como dice un refrán chino, si quieres hacerte rico, construye primero las carreteras. Desde la fundación de la República Popular China, el país se ha comprometido a construir una red de transporte robusta, conectando las aldeas remotas con las metrópolis bulliciosas y facilitando el flujo continuo tanto de personas como bienes.
Entre sus más recientes esfuerzos para impulsar la conectividad regional, China puso en funcionamiento dos secciones de ferrocarril en la Gran Área de la Bahía de Guangdong-Hong Kong-Macao en mayo, marcando la apertura de la ruta ferroviaria interurbana más extensa de la zona.
La línea de 258 kilómetros de longitud, que une ciudades como Huizhou, Dongguan, Guangzhou, Foshan y Zhaoqing, muestra la dedicación de China a mejorar el transporte en su vasta extensión.
El sector del transporte de China, que en los últimos 75 años ha pasado de contar con unas infraestructuras subdesarrolladas a una red en expansión, ha evolucionado hasta convertirse en un sistema multifacético e integrado, con una alta conectividad nacional e internacional.
Los ferrocarriles de China establecieron un nuevo récord, con más de 21 millones de viajes de pasajeros gestionados el martes pasado, en la primera jornada de la semana de vacaciones por el Día Nacional, lo que pone de relieve la impresionante capacidad y fiabilidad del país.
Las carreteras siguen siendo el modo de transporte más popular en China y estas infraestructuras han experimentado un crecimiento extraordinario. De apenas 80.700 kilómetros en los primeros días de la fundación del país, la longitud total de carreteras ha aumentado ahora a más de 5,4 millones de kilómetros.
En particular, la longitud de las carreteras en las zonas rurales alcanzó unos 4,6 millones de kilómetros a finales de 2023, lo que representa el 84,6 por ciento del total. Con la construcción de más carreteras, viajar ya no es un lujo para los residentes de zonas aisladas y remotas, lo que ha mejorado enormemente su movilidad y ha generado más oportunidades laborales.
China también cuenta actualmente con la red ferroviaria operativa más transitada del mundo, con una extensión de más de 160.000 kilómetros. Esto representa un salto fenomenal respecto de los 21.000 kilómetros de ferrocarriles que había cuando se fundó el país.
La rápida urbanización ha impulsado la expansión del sistema integral de transporte en las ciudades chinas. Con más de 10.000 kilómetros de ferrocarriles urbanos operativos y 259 aeropuertos de aviación civil certificados, las urbes chinas han creado sólidas capacidades de transporte para atender las crecientes necesidades de su población urbana.
Por su parte, la logística se ha vuelto más eficiente con el rápido crecimiento de su transporte multimodal, impulsando a China a convertirse en el principal centro de entrega exprés del mundo durante los últimos 10 años, con cifras de paquetes de entrega urgente per cápita que superaron las 90 piezas en 2023 a nivel nacional.
China ha perseguido el desarrollo de alta calidad de su sector de transporte, priorizando la sostenibilidad y la transformación inteligente.
El país ha promovido el uso de vehículos de nueva energía, con datos que muestran que más de 530.000 autobuses eléctricos y 1 millón de vehículos logísticos operaban en áreas urbanas a fines de 2023.
Los vehículos de nueva energía (VNE) han ganado gran popularidad entre los propietarios de automóviles chinos. Los datos industriales muestran que la tasa de penetración de los VNE en el mercado nacional se situó en el 44,8 por ciento en agosto, lo que significa que dos de cada cinco automóviles vendidos en China ahora funcionan con nueva energía.
Las tecnologías inteligentes y digitales están transformando el sector. China ha intensificado los esfuerzos para hacer que los ferrocarriles, las carreteras, las rutas marítimas, la aviación civil y los servicios postales sean más inteligentes.
El país es líder mundial en cuanto a la escala de terminales de contenedores automatizadas ya construidas o en construcción. Asimismo, Los servicios digitales para el transporte se han convertido en parte de la vida cotidiana de las personas. Las reserva de taxis en línea manejan más de 30 millones de pedidos diarios y hay servicios de alquiler de bicicletas disponibles en más de 400 ciudades.
Otra fuerza que está transformando el panorama del transporte son las tecnologías de conducción autónoma.
En una exposición celebrada el mes pasado, la plataforma china de transporte compartido Didi Chuxing mostró sus últimas tecnologías de conducción autónoma. Con sensores remotos en los techos de los automóviles y alimentado por un software, el innovador sistema de la compañía puede automatizar todo el proceso de conducción, desde el envío de pedidos y la recogida de pasajeros hasta la navegación por las rutas del viaje.
Con el respaldo de múltiples centros de operaciones inteligentes, el sistema podría satisfacer las necesidades de los vehículos de conducción autónoma, según Li Jian, quien dirige las operaciones de conducción autónoma de Didi.
De cara al futuro, el desarrollo de la red de transporte de China estará guiado por hojas de ruta claras. Según un plan general sobre el transporte presentado en 2021, el país pretende establecer una red de transporte nacional moderna, de alta calidad e integral que sea conveniente, rentable, ecológica, inteligente y segura.
La red contará con una mayor conectividad nacional e internacional, acceso multicanal a las principales ciudades y una cobertura efectiva de los nodos a nivel de distrito, según el plan.
