Premio Nacional de Literatura 2004 comentó su último poemario.
Poeta se refirió además al escenario actual de la cultura chilena.
Desde su departamento ubicado en el sector del Parque Forestal y encerrado, la mayoría del tiempo, en su habitación, el Premio Nacional de Literatura 2004, Armando Uribe, arremetió nuevamente en la poesía con "Feo", el poemario publicado por LOM Ediciones.
"Me lo llevo el día entero vestido encima de la cama, leyendo y escribiendo y no me muevo de viaje ni siquiera de mi habitación a la escalera del departamento, y mucho menos salgo", confesó de partida el autor de libros como "Vergüenza ajena" y "De nada", quien durante un mes se dedicó a escribir su último trabajo.
En "Feo" el escritor de 79 años de edad vuelve a centrarse en Chile y habla sobre la
muerte y la vida, sobre la poesía, y el paso inexorable del tiempo, pero principalmente, señaló, se basa en su principal misión:
"Lo que yo trato de hacer en el asunto de los versos, es sacar belleza de la fealdad. De la misma manera que se sacan fuerzas de las flaquezas", sentenció el poeta sobre el título que según el mismo, hace alusión al libro "Meditaciones Suramericanas" del Conde De Keyserling, texto en el cual se refiere a Chile como un país "que privilegia lo feo".
"Feo" del también abogado y ex embajador de Chile en Estados Unidos y China, termina con una trilogía que incluye los títulos "Baba" y "Tonto" y se suma a "Ya no doy más, prosaicas que me amáis" publicado por Ediciones UDP, también disponible en las librerias nacionales.
La dura mirada a los bestseller
Conocido por su opinión directa y confrontacional, Armando Uribe es enfático en señalar que el principal problema en Chile es "el neoliberalismo capitalista de mercado desregulado, que es el sistema que ha existido en Chile antes que en ninguna parte, desde el año 1975".
Según el literato, debido a este sistema es "que la crítica literaria y otra especie, no sólo en Chile, sino que en el mundo entero, ha bajado de categoría enormemente porque no tienen el valores reales ni de arte, letras y cultura, sino sólo el valor monetario".
En la misma línea, el autor de 60 títulos a lo largo de su carrera sentenció sin tapujos que "por eso es que llega tanto que una escritora mediocre como es la señora (Isabel) Allende Llona se le tuvo que dar el Premio Nacional, porque era bestseller".
"Es asqueroso ver a gente que está senil"
Con 79 años de vida, Uribe se describe como "un viejo bien notorio para mi mismo" que va "contabilizando todo el tiempo mi estado de senilidad".
Eso, porque es duro en criticar la vejez. "Resulta que viejos eternos que tienen noventa y tantos años aparecen como pollitos recién nacidos dictaminando y dando conferencias y presentando sus caritas todas arrugadas en fotografías".
"Esa es una cosa, incluso en mi opinión, obscena. Resulta asqueroso desde el punto de vista estético y moral, ver gente que está senil, así como yo reconozco estarlo también".
Aquejado de problemas respiratorios debido a su adicción al cigarrillo durante largos años, el poeta sufre hace un año de lo que comenta es una enfermedad que sus amigos creyeron, había sido inventada por él.
"Tengo una cosa que se llama Claudicación intermitente, que tiene que ver con caminar con dificultades", confirmó entre risas, tras recordar que uno de esos mismos amigos sufre ahora del mal.
Una patología muscular, que le impide desplazarse normalmente por lo que sale de su hogar sólo cuando visita al doctor.
"Yo considero que se vive demasiado tiempo en nuestras épocas, que este aumento de los años de vida es una torpeza y un error humano colectivo", finaliza pesimista el hombre, que tras pedir información sobre la publicación de esta nota dice que "es poco probable que lo lea, porque ya lo dije y con eso, me basta".
