El patio del palacio de los Inválidos fue el escenario del acto.
La ceremonia de elevado contenido castrense fue presidida por el presidente, François Hollande.
Francia rindió este jueves un último homenaje al resistente, diplomático y escritor Stéphane Hessel en una ceremonia de carácter militar presidida por el presidente, François Hollande, antes del entierro en el parisiense cementerio de Montparnasse.
El patio del palacio de los Inválidos fue el escenario de un acto de elevado contenido castrense, en recuerdo de la participación de Hessel en la resistencia contra los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.
La ceremonia contó con la participación de la viuda del autor de "¡Indígnense!", de la mayor parte del gobierno -con excepción del ministro de Defensa, de viaje a Mali-, de las más altas dignidades del país y del primer ministro belga, Elio di Rupo.
Hollande pronunció el elogio fúnebre del escritor, fallecido el pasado día 27 a los 95 años de edad.
"Su libertad de palabra"
El presidente destacó su "permanente compromiso por la libertad", que le llevó a enrolarse en la resistencia con 23 años, a escaparse de un campo de concentración nazi y a prestar "su trabajo, su experiencia y su compromiso" a diversas causas a lo largo de su vida.
"Con más de 90 años inspiró a la juventud de Francia y del resto del mundo. Su llamamiento a la indignación no fue solo una petición de revuelta, fue una apelación a la acción, porque el peor enemigo del hombre es la indiferencia", aseguró Hollande.
El presidente socialista, que durante la campaña electoral que le llevó al poder en mayo pasado recibió el apoyo explícito de Hessel, recordó que el diplomático siempre mantuvo "su libertad de palabra" y que fue "un ciudadano sin fronteras, un europeo sin condiciones y un militante sin partido".
Hollande recordó la dureza de Hessel contra Israel en el conflicto con el pueblo palestino y señaló que en ese punto no estuvieron de acuerdo.
El escritor comparó la ocupación de los territorios palestinos por Israel con la de los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.
Voz sin fronteras
En el homenaje también tomó la palabra su compañero en la resistencia Jean-Louis Crémieux-Brilhac, que compartió compromiso en la oficina de información de la Francia Libre.
"En el desarraigo creciente, el escepticismo creciente hacia la política, hiciste escuchar una voz que superó las fronteras, un grito de joven nonagenario que se levantó para rechazar el imperio dañino del rey dinero", afirmó el resistente en un emotivo discurso dirigido al fallecido.
La actriz Carole Bouquet leyó un poema de Apollinaire como símbolo del amor de Hessel por la poesía.
El cuerpo de Hessel será enterrado esta tarde en una ceremonia íntima.
