El presidente de Bolivia, Evo Morales, exigió este sábado que se conozca "la verdad" en torno a la muerte del poeta y premio Nobel Pablo Neruda, luego que se diera a conocer que no murió producto de una caquexia cancerosa a raíz del cáncer de próstata que lo afectaba, tal como aparece en su certificado de defunción.
"La caquexia está descartada. Eso está claro", manifestó este viernes el ministro en visita Mario Carroza -quien lleva adelante la investigación- tras reunirse con el segundo panel de peritos nacionales y extranjeros, que hallaron una toxina en los restos del poeta, por lo que pidieron más análisis para concluir si hubo participación de terceros.
A través de su cuenta de Twitter, el mandatario boliviano conmemoró los 46 años, que se cumplen este sábado 21 de octubre, desde que la Academia Sueca reconoció la poesía del chileno.
"Como hoy, 1971, recibía el premio Nobel de Literatura el hermano poeta y revolucionario chileno Pablo Neruda, amigo de Allende, Fidel y Che", dijo el líder paceño en la red social.
Unos minutos más tarde, Morales se refirió a las conclusiones de los análisis al cuerpo del Nobel, subrayando que "expertos forenses determinaron que el líder comunista y poeta chileno, Pablo Neruda, no murió por enfermedad", y enfatizó: "La verdad debe conocerse".
Tanatólogo pide prudencia: "Las posibilidades son muchas"
En conversación con El Diario de Cooperativa, el tanatólogo español Aurelio Luna -quien informó este viernes que la causa de muerte de Pablo Neruda no tiene relación con el cáncer de próstata- explicó los siguientes pasos en las pericias y recalcó que entre seis meses y un año los resultados de los datos permitirán confirmar o excluir la acción de un tercero en la muerte del poeta.
"Una situación de cáncer provoca una caída del sistema inmunológico, entonces se convierte en una persona más vulnerable. Por eso es que se trata de ver el posible origen de esas bacterias, porque si por cualquier motivo se pueden caracterizar que estamos ante bacterias que han sido generadas en un laboratorio, evidentemente estaríamos entonces con la certeza de una intervención de un tercero", precisó el catedrático.
"La bacteria puede proceder por contaminación externa de los restos, puede estar en el cadáver y no tener relación con el fallecimiento, o puede tener relación con el fallecimiento, y eso exige una serie de análisis, en primer, saber si la bacteria es endógena, si es exógena, si es creada en un laboratorio o no, para eso hace falta no tanto realizar nuevos análisis, sino utilizar los datos que se han recogido y que exigen seguir trabajando en ellos", detalló.
"Si la bacteria tiene los rasgos y las características de una cepa creada en un laboratorio, no admite la más mínima duda de que se trata de un asesinato. Es verdad que también se puede administrar por otra vías otro tipo de bacterias que a lo mejor no han sido de un laboratorio. Lo fundamental es poder caracterizar bien, obtener información, sobre antigüedad de la cepa, características, números de lectura", agregó.
El experto recalcó que, entre los distintos parámetros del análisis, se debe determinar "también el año de la cepa de esas bacterias, porque en función del deterioro del ADN se puede saber si ese ADN procede de bacterias del año '92, del año 1973 o del año 2015" o si es o no "una infección normal dentro del proceso tumoral".
"Hay que ser muy prudentes, porque las posibilidades son muchas y lo que hay que hacer fundamentalmente es recoger datos para ir descartando y precisando, porque aquí lo importante es obtener respuestas que sean contundentes y consistentes", enfatizó.
Luna también descartó que en la muerte del vate haya influido la bacteria "estafilococo dorado", encontrada en sus restos óseos: "Había una proteína que aparecía de cobertura, que cuando se realizó el estudio genético se determinó que el estafilococo dorado era de contaminación externa, por lo cual se puede excluir como causa del fallecimiento", dijo.
