La columna de Aldo Schiappacasse: ¿Por qué cayó Jadue?
El comentarista de Al Aire Libre analiza la publicación "Tarjeta Roja".
El comentarista de Al Aire Libre analiza la publicación "Tarjeta Roja".
Por Aldo Rómulo Schiappacasse, @AldoRomuloS.
Sergio Jadue vive en una jaula de oro en Miami, esperando su sentencia en un proceso que llevó a cabo el FBI y donde el ex presidente del fútbol chileno colaboró como informante y delator.
De cómo huyó para entregarse a la justicia y la operación que tendió junto a sus cómplices para cobrar sobornos y comisiones en el extranjero ya hay cierta claridad, sobre todo después del trabajo investigativo de varios periodistas en Chile, y de las acciones legales que emprendió la Fiscalía Oriente en su contra.
Jadue es -y así está consignado en todos los estudios que se han hecho sobre el caso- un pez menos en esta trama. Un advenedizo que llegó gustoso a integrarse a un club que operaba impunemente por el mundo, con la FIFA como eje central, para usufructuar de los jugosos contratos por los derechos y la publicidad en el juego.
Lo suyo era la demostración empírica de cómo con un poco de audacia cualquiera que fuera aceptado en los pasillos de Zurich y la Confederación podía acceder al mundo dorado y lujoso de los funcionarios del fútbol internacional.
Lo que cuesta entender todavía es cómo se armó el rompecabezas que llevó a la detención de la banda organizada del delito futbolero. Y eso es lo que explica el periodista estadounidense Ken Bensinger, el reportero que más de cerca ha seguido el trabajo de los organismos de su país para desbaratar esta red mundial. Lo hace en un libro apasionante de nombre muy poco original: "Tarjeta Roja", lanzado simultáneamente en inglés y español por Planeta en julio de este año.
Escrito con trepidante afán, lo fundamental es entender que un grupo de agentes tomó una hebra -un escándalo en la Concacaf y la traición de Chuck Blazer, un dirigente norteamericano- para armar un caso que asimilaron a la estructura piramidal de los mafiosos. Con sigilo, astucia y recurriendo a la colaboración de los involucrados, grabaron, acumularon pruebas y confrontaron a quienes hoy, como Jadue, cumplen o esperan sentencia.
Lo más seductor de "Tarjeta Roja" es que describe minuciosamente el rol de los investigadores. Los sigue en su trabajo, en sus obsesiones, en sus enfermedades y en sus errores. Va sumando gente en el camino y entiende que en oficinas de Nueva York y California se fue tejiendo una trama fascinante que enlodó a la FIFA, a la Conmebol y a todos quienes participaron activamente de la corrupta maquinaria y a quienes optaron por el silencio cómplice.
Es, con lejos, el mejor libro para entender el proceso. Y, lo mejor, está escrito como una novela de suspenso, investigación y lujo, con personajes en constante confrontación.
¿Lo desalentador? El mismo Bensinger, al presentar su libro y después de hacer fe del testimonio de todas sus fuentes, asegura que en todos los organismos de los que depende el juego, la realidad sigue siendo la misma. Hay corrupción a destajo, funcionarios corruptos y cómplices que callan y ocultan la verdad.
El libro aún no llega a las librerías chilenas, pero está disponible en Amazon y otras tiendas on line. Un imperdible para comprender lo que en portada anuncian como "el fraude más grande en la historia del deporte".