La columna de Pelotazo: No le echen la culpa a Colo Colo
Dicen que los albos “juegan mal” y son punteros.
¿A quién deben ir los dardos?
Dicen que los albos “juegan mal” y son punteros.
¿A quién deben ir los dardos?
Colo Colo es puntero invicto del Torneo de Clausura. Además es la defensa menos batida. Simple. Son el mejor cuadro, hasta ahora, del campeonato. Esto no es una interpretación, es la verdad a la luz de los números.
Esta situación se confronta con el paladar de muchos. "Es que Colo Colo no juega bien", dicen. ¿Importa eso? En el torneo todavía no. Faltan rivales por enfrentar, como Universidad Católica este fin de semana, en lo que serán nuevas vallas rumbo a conseguir una nueva corona.
Seamos sensatos. Esto se puede analizar desde el punto de vista de los albos y de todos los equipos. Desde la arista alba, este nivel de juego puede preocupar en el futuro pensando más en la Copa Libertadores, en el deseo de alcanzar los octavos de final después de nueve años. Porque en el campeonato, insisto, es irrisoria la crítica. Si ni siquiera han perdido.
Ahí aparece el prisma del resto. Si Colo Colo juega mal, qué queda para el resto. Si el que juega mal está líder, aún no lo derrotan y sólo le han anotado dos goles en siete encuentros, el resto debe analizarse. ¿Contraté buenos refuerzos? ¿El técnico no da la talla? ¿Hay pensar mejor en el Apertura? Porque el Clausura ya está en la mitad del recorrido.
En este segundo punto la ANFP debe ponerse a pensar. Si está la sensación en el ambiente que hace varios torneos el campeón no es el mejor, sino el menos malo, hay que ver cómo corregir esto. En la próxima temporada el límite de extranjeros en el plantel será de cinco, pero sólo cuatro podrán estar en cancha de forma simultánea. Para 2017-18 el número se reducirá a cuatro contratados e igual cantidad en cancha. ¿Servirá esto para subir el nivel del torneo? No lo sabemos, a priori sólo sirve para que los chilenos tengan más chances de jugar.
Este cambio obligará a los clubes a elegir mejor lo que traen desde fuera de nuestros límites y no cautivarse tan fácil con un compacto de YouTube de un jugador que el año anterior jugó poco y nada.
Sobre el nivel de juego, eso es problema de cada técnico o de cada directivo que lo contrata. Desde 1910 al 2006 el fútbol chileno no veía con malos ojos un entrenador defensivo, o que no jugara al ataque. Con un DT así volvimos a un mundial tras 16 años. Con la llegada de Marcelo Bielsa muchos quedaron tan cautivados que perdieron la memoria. Qué el Loco juegue así, claramente no implica que de ahí en adelante todos jugaran así. Sin embargo, el hincha más apasionado no lo entiende o no lo quiere entender.
El paso de Jorge Sampaoli no ayudó al entendimiento. Porque jugando al ataque Chile ganó el primer título de la historia. No es casualidad que la ANFP haya demorado tanto en conseguir otro técnico para la Roja. La presión ambiente era tener un DT ofensivo, siendo que el presidente del fútbol chileno cuando ejerció nunca fue así. Un choque de estilos en la cabeza. Y así se llegó a Juan Antonio Pizzi.
Lo importante es entender una cosa. No hay sistema táctico perfecto en sí. El sistema táctico será bueno en la medida que logre el objetivo. El de José Luis Sierra está sirviendo por ahora. Y si jugando así ya ganó dos títulos nacionales con dos equipos diferentes... ¿para qué cambiar?
Si quieren divertirse jueguen FIFA o PES, pero dejen a los técnicos trabajar tranquilos. Al menos a quienes cumplen con las expectativas.