Yelena Isinbáyeva deja abierta la posibilidad de participar en Tokio 2020
La garrochista rusa, que anunció su retiro, evitó dar un "no" rotundo a su presencia en los próximos Juegos.
La garrochista rusa, que anunció su retiro, evitó dar un "no" rotundo a su presencia en los próximos Juegos.
La rusa Yelena Isinbáyeva, doble campeona olímpica de salto con garrocha y una de las grandes ausencias de los Juegos Olímpicos de Río 2016, evitó dar un "no" rotundo a su posible participación en los Juegos de Tokio 2020, en una entrevista publicada por el periódico ruso Sport-Express.
"Solo Dios sabe lo que ocurrirá en la próxima Olimpiada. En principio no hay nada imposible", dijo la garrochista, de 34 años, que el viernes pasado anunció su retiro de las pistas.
Isinbáyeva destacó la medalla de oro conseguida en Río por la saltadora de altura española Ruth Beitia, de 37 años.
"Resulta que con 37 años también se pueden ganar en unos Juegos Olímpicos", dijo la rusa, que aclaró que no le gustaría hacer un paralelo con su situación debido a que ya anunció su retiro.
Sin embargo, la deportista no cerró definitivamente la puerta a posible retorno a la competición.
"El tiempo dirá, cuando se acerque Tokio 2020. No voy a decir un 'no' rotundo, pero tampoco voy a prometer nada", dijo Isinbáyeva.
Ante la insistencia de Sport Express sobre la posibilitad de su vuelta a las pistas, la atleta replicó: "Cerremos esa puerta. Si más tarde surge la necesidad, la volveré abrir".
"Si de pronto las estrellas se conjuntan mejor que en Brasil, entonces todo es posible", agregó.
La "zarina" de la garrocha no pudo competir en Río tras ser excluida junto al resto del equipo ruso de atletismo por la Federación Internacional de Atletismo, que retiró la licencia a la federación rusa por connivencia con el dopaje.
Isinbáyeva, doble campeona olímpica en Atenas y Pekín, y bronce en Londres, aspiraba a colgarse su tercera medalla de oro en Río, para lo que contaba con la segunda mejor marca del año al aire libre (4,90).