El mexicano superó la sombra del empate de 2017 y terminó en dividida decisión con el invicto del boxeador kazajo.
El peleador mexicano Saúl "Canelo" Álvarez ofreció una pelea reñida y superó por la vía de la decisión mayoritaria a Gennady Golovkin para arrebatarle los títulos de peso medio avalados por la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y Consejo Mundial (CMB).
En pelea pactada a 12 asaltos en el T-Mobile Arena, que llenó su capacidad de 21.965 espectadores, los jueces Dave Moretti y Steve Weisfeld anotaron la pelea 115-113 para Álvarez, y Glenn Feldman anotó 114-114.
Con su victoria Álvarez no sólo se acreditó los dos títulos de campeón, sino que puso fin a la carrera invicta de Golovkin y dio por terminado su histórico reinado de las 160 libras, con marca de 20 defensas, que comparte con Bernard Hopkins.
Moretti y Weisfeld, que anotaron la pelea del año pasado entre ambos con calificaciones de 115-113 para Golovkin, esta vez dieron la mejor puntuación a Álvarez en el décimo segundo asalto,
Esta revancha programada inicialmente para el 5 de mayo, fue cancelada cuando Álvarez falló dos pruebas de drogas para el clenbuterol que mejora el rendimiento y fue suspendida por seis meses por la Comisión Atlética del Estado de Nevada.
Alvarez, que deja sus números en 50-1-2, con 34 nocauts, de 28 años de edad, recuperó el título de peso mediano que había dejado vacante.
En el primer episodio ambos peleadores salieron a realizar boxeo de estudio para conocer el alcance de sus guantes y el poder de puños, aunque Golovkin, que vio caer su marca a 38-1-1, con 34 nocáuts, de 36 años, mostró mejor trabajo y ganó la ronda.
A partir de la segunda vuelta, Álvarez intento a crear una táctica de pelea que le dejó frutos, ya que conectó un gancho y un recto de derecha sólidos.
Golovkin sorprendió a Álvarez con un uppercut en el cuarto asalto y continuó disparando castigo y manteniendo su distancia con poderosos jabs.
En la quinta vuelta Álvarez conectó un derechazo que dañó a Golovkin y el mexicano trató de continuar el ataque pero Golovkin siguió manejando a la perfección el jab para mantener al mexicano a distancia.
En las rondas intermedias el mexicano incrementó la presión contra Golovkin, quien sin ofrecer lo mejor de su boxeo, hacía una pelea de retirada.
A principios del décimo asalto, Álvarez conectó una serie de golpes en la cabeza que obligaron a Golovkin a cubrirse y buscar una vía de escape.
Luego de recuperarse, Golovkin mandó a Alvarez a las cuerdas para castigarlo, pero el mexicano respondió cada golpe que recibía, en uno de los intercambios más agresivos de la pelea, que puso de pie a los asistentes.
En el décimo primer asalto, Golovkin lastimó a Álvarez con un par de manos derechas, luego remató con gancho de izquierda que dejó fuera de balance al mexicano.
Las calificaciones aparentemente estaban empatadas al inicio de la última ronda, en la que ambos lanzaron sus mejores golpes.
Álvarez, quien sufrió un corte en su ojo izquierdo, mostró respeto por Golovkin tras el combate.
De acuerdo a las estadísticas, Álvarez conectó 202 de 622 golpes (33 por ciento) y Golovkin conectó 234 de 879 (27 por ciento).
