"No tuve la suficiente precaución", justificó la estrella filipina.
El azteca aseguró "dar el golpe perfecto" para ganar.
El mexicano Juan Manuel Márquez venció por nocáut al filipino Manny Pacquiao en la saga de peleas que ambos protagonizan, por lo que estiraron hasta un quinto duelo su serie de combates.
El azteca logró la noche del sábado un espectacular victoria, al vencer -en el cuarto combate entre ambos- por nocáut en el sexto asalto.
La pelea disputada en el MGM Grand Garden Arena, de Las Vegas, ante 16.348 espectadores, y dentro de la categoría del peso welter, sin títulos en juego, no defraudó y cumplió con las expectativas, con un final sorpresivo y dramático, que ya es histórico.
Cuando todo parecía que Pacquiao, de 33 años, iba a conseguir la victoria clara que dejase fuera de dudas los dos anteriores triunfos que había conseguido, llegó el "golpe perfecto", el soñado por cualquier púgil para ganar un combate.
Márquez, de 39 años, que en el tercer asalto ya había tirado a la lona a Pacquiao con otra derecha a la contra, cuando el púgil filipino dominaba y mejor boxeaba, sintió que su final estaba cerca después de caer él en el quinto.
Sin embargo, llegó el momento inesperado, con apenas segundos para concluir el sexto asalto, Pacquiao en su afán de seguir con el castigo fue a buscar a las cuerdas a Márquez, éste lo esperó y le colocó una derecha demoledora que le impactó por completo en la cara.
Pacquiao cayó fulminado boca abajo sobre la lona para tardar varios minutos en recuperarse.
"No tuve la suficiente precaución ante un rival nada fácil como ya ha demostrado en los 42 asaltos que hemos disputado desde 2004", comentó el filipino tras el combate.
"Lancé el golpe perfecto, que no fue sólo producto de la suerte sino de haberlo entrenado y trabajado durante mucho tiempo. Sabía que Manny (Pacquiao) podía dejarme fuera de combate en cualquier momento", admitió Márquez.
