Retrasos en las obras pueden modificar escenario de apertura del Mundial 2014
El reducto que construye Corinthians aún no está listo.
Corinthians construye un estadio para la inauguración del Mundial.
El reducto que construye Corinthians aún no está listo.
Corinthians construye un estadio para la inauguración del Mundial.
Los atrasos y problemas de financiamiento del estadio que construye Corinthians en la ciudad de Sao Paulo activaron en Brasil y en la FIFA que barajan la opción de cambiar el escenario de la inauguración del Mundial 2014.
A la tardanza en las obras, se suma un conflicto bancario que amenaza la financiación del proyecto, que podría ser "paralizado" en caso de que el asunto no se resuelva en las próximas semanas, de acuerdo al o que advirtió el diario O Estado de Sao Paulo.
El problema radica en que los dos bancos estatales que financian las obras se niegan a liberar una línea de crédito por una cifra cercana a 200 millones de dólares, si la empresa constructora Odebrecht, responsable de las obras, no ofrece las debidas garantías para recibir el dinero.
Según informó el periódico, el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (Bndes) y el Banco do Brasil exigen que la empresa avale la operación con parte de su patrimonio o presente garantías bancarias suficientes.
La delicada situación fue reconocida por el ministro de Deportes, Aldo Rebelo, quien explicó que la constructora debe ser responsable por los préstamos de los bancos públicos, que por ley no tienen cómo financiar directamente a un club de fútbol como Corinthians.
"Es necesario encontrar una solución", declaró el ministro, quien según O Estado de Sao Paulo discutió el asunto con el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, durante una reunión que mantuvieron en la sede de la entidad, en Zúrich, el pasado miércoles.
Durante un encuentro entre Rebelo y Joseph Blatter, mandamás de la FIFA, se habría barajado la posibilidad de que se descarte ese escenario como sede del partido inaugural del Mundial de 2014.
La opción sería trasladar la inauguración del Mundial a Brasilia, cuyo estadio está casi terminado y será usado en junio próximo para la apertura de la Copa de las Confederaciones.