Los mundiales a puro Pelotazo: Arquero jugador y mucho más

A siete días del comienzo del Mundial de Brasil 2014, en Cooperativa.cl seguimos contándote las mejores historias y entregándote los mejores datos con respecto a este torneo que comenzó en 1930 y que cumplirá 20 ediciones a partir de próximo 12 de junio.

Cada día hemos compartido cinco relatos que servirán para ir "calentando" el ambiente de cara a la máxima cita del balompié planetario.

Los futbolistas son ídolos para muchos y entre tanto seguidor aparecen las mujeres que dan todo por conocer al deportista para sacarse una foto o conseguir un autógrafo. Así pasó en México 1970 con el inglés Bobby Moore que al parecer se encariñó demasiado con una fanática y le quiso regalar una joya. Pero hubo dos problemas. El primero, es que el europeo fue acusado de robarse un brazalete millonario de la joyería del hotel donde su selección se hospedaba. Y el segundo, es que la mujer era una prostituta. Como para andar con más cuidado.

En los mundiales hay jugadores que hacen historia y uno de ellos es el delantero uruguayo Héctor Castro. Formó parte de la selección charrúa que fue campeona del mundo en 1930, jugando dos encuentros y marcando dos goles, uno de ellos en la final donde derrotaron 4-2 a Argentina. Su apodo era especial: "el divino manco" y tenía su razón de ser. Cuando tenía trece años accidentalmente cortó su antebrazo derecho con una sierra eléctrica, lo que de ninguna forma acabó con su sueño de jugar al fútbol. De hecho a los 17 debutó como profesional y a los 26 gritó campeón del mundo.

Estamos claros que el fútbol, al menos en los mundiales, siempre se ha jugado con zapatos. Sin embargo, hubo una selección que quiso cambiar la historia. Es que India clasificó a Brasil 1950 tras la deserción de Birmania, Filipinas e Indonesia y la idea de sus futbolistas era jugar el torneo sin calzado. Obviamente la FIFA no los autorizó y los indios desistieron a participar. De esta forma no hubo selecciones asiáticas en ese campeonato y el ente rector del fútbol quedó a ojos de muchos como poco acogedor.

Hay héroes en los mundiales y no necesariamente por convertir goles, sino por evitarlos. Y no hablamos de un arquero en particular, sino del delantero uruguayo Luis Suárez. El jugador del Liverpool estuvo con su selección en Sudáfrica 2010 y en cuartos de final debió enfrentar a Ghana. Fue un dueño reñido que llegó al alargue y ahí apareció Lucho, quien parado en la línea de gol, desvió con su mano uan pelota que era gol africano. El árbitro lo expulsó y el ghanés erró el penal. Al final el 1-1 tuvo definición por penales y la Celeste pasó a semifinales.

El mundial de 2002 fue la primera ocasión para que dos países organizaran a la par un torneo y ello por supuesto trajo problemas de ego entre las naciones. Es que oficialmente la Copa del Mundo se llamaba Corea-Japón 2002, pero los nipones imprimieron boletos y afiches donde decía Japón-Corea 2002. Ello provocó que la FIFA de inmediato mandara a reimprimir todo a los japoneses para que se alinearan con la disposición. Ya en el torneo mismo los surcoreanos fueron cuartos tras perder con Turquía y los nipones llegaron a octavos tras caer con la misma selección.