El australiano comandó una fuga de seis pedaleros hacia la meta en Ravel.
El británico Chris Froome continúa como puntero de la general.
El australiano Michael Matthews, del equipo Orica, se impuso este martes en la décima etapa del Tour de Francia al ser el más rápido de una escapada de seis ciclistas que se presentó en solitario en la meta de Revel.
El británico Chris Froome, del Sky, que entró a 9'38" en el pelotón de favoritos, conservó el liderato de la general en la que no hubo diferencias importantes.
Matthews, de 25 años, logró así su primer triunfo en el Tour tras haberse impuesto el año pasado en el Giro de Italia.
El ciclista del Orica superó en el "mini sprint" al eslovaco Peter Sagan y al noruego Edvald Boasson Hagen.
Completaban esa fuga el francés Samuel Dumoulin (AG2R), el sudafricano Daryl Impey, el australiano Luke Durbridge y el belga Greg Van Avermaet.
Fue un despegue que se hizo en la bajada al puerto de Envalira, que estaba situado nada más comenzar la jornada en la localidad andorrana de Escaldes Engordany y en el que esos seis ciclistas fueron los que más aguantaron.
El pelotón de favoritos, que durante varios kilómetros aceleró para tratar de atrapar a los fugados, acabó por tirar la toalla y dejarles que se jugaran ellos la victoria de etapa.
Froome mantiene el liderato con 16 segundos de ventaja sobre el británico Adam Yates del Orica, 19 frente al irlandés Daniel Martin, del Etixx, y 23 con el colombiano Nairo Quintana.
