La columna de Toño Prieto: Bienvenido el inconformismo

¿No sé por qué no están contentos?  La pregunta la lanzó el técnico de la selección chilena, Juan Antonio Pizzi, a los periodistas en la sala de prensa tras el 3-1 ante Venezuela en el Estadio Monumental.

La respuesta tiene dos partes:

1.- Sí es por la victoria, hay una sola postura, todos felices. Tres puntos y otra vez en zona de clasificación. No hay conflicto.

2.- El fútbol tiene otro aspecto, lo relacionado con el juego, donde la subjetividad está muy presente.

Sí un equipo juega bien, controla la pelota, la mueve con precisión en los espacios y genera hasta 15 oportunidades, es para aplaudir dirá la mayoría.

Pero, hay más de un pero. Pizzi dio en el punto. "Están muy mal acostumbrados ustedes", reflexionó el seleccionador nacional y encaró a los medios.

Tiene razón el DT, esta generación puso hace rato la vara muy alta. Dio un salto de calidad donde se gana con una forma y propuesta, y con una alta exigencia en rendimientos.

Esa fórmula apareció frente a Venezuela, pero quedó una gran cuenta pendiente: La escasa contundencia para anotar y sumar goles en la cuenta de ahorro para una potencial definición.

La selección salió de la cancha con la cabeza mirando el pasto. No hubo euforia.

Y ante los micrófonos hubo intentos de los futbolistas de maquillar el desperdicio de haber conseguido una gran goleada.

Bienvenido el inconformismo.