Chile y Argentina volverán a enfrentarse este lunes en el marco de la Copa América, enfrentamiento al que la "Roja" llega con un registro negativo en el historial, considerando que sólo rescató siete empates en 25 confrontaciones ante los trasandinos por el certamen continental.
Y es que a pesar de que la selección nacional se impuso a la "Albiceleste" en el último lance vía lanzamientos penales en la final de 2015, lo cierto es que el resultado oficial de ese partido es un empate sin goles.
El primer cruce entre ambos tuvo lugar en 1916, en la primera edición del torneo, cuando se llamaba Campeonato Sudamericano y terminó 6-1 en favor de los argentinos en la cancha de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires. El tanto chileno fue obra de Telésforo Báez.
Tras ello, la "Albiceleste" completaría tres triunfos en fila, tras imponerse 1-0 en el torneo de 1917 disputado en Uruguay y posteriormente por 4-1 en el Campeonato de Brasil de 1919.
Recién en el cuarto compromiso y con Chile haciendo de anfitrión de la cita en 1920 se pudo sumar ante los trasandinos, amén de un empate 1-1 en el Estadio Sporting de Viña del Mar, gracias a un tanto de Hernando Bolados.
Tras ello, debieron pasar dos ediciones para que la "Roja" volviera a acoger un Sudamericano (1926) y rescatara otra paridad: 1-1 en el Campos de Sports de Ñuñoa, con anotación de Guillermo Saavedra.
La tercera igualdad llegaría en 1942 y fue en terreno neutral, amén de un 0-0 en la cancha del Estadio Centenario de Montevideo y tres años más tarde, en la decimoctava copa, se volvió a empatar, esta vez 1-1, con tanto de Desiderio Medina, en duelo jugado en el Estadio Nacional.
La quinta paridad se dio en el Campeonato Sudamericano de Ecuador de 1947, amén de un nuevo empate a uno, con acierto de Fernando Riera para los nacionales.
De ahí en más, debieron pasar siete encuentros y más de cuatro décadas para que la "Roja" volviera a rescatar puntos frente a Argentina. Fue en la Copa de Chile 1991, edición en la que jugaron dos veces, primero por fase de grupos, con victoria "Albiceleste" por la mínima, y posteriormente, en el cuadrangular final, un 0-0 en el gramado del Nacional.
Por último, luego de sendas caídas por 4-0 y 2-0, en las copas de Uruguay 1995 y Bolivia 1997, respectivamente, llegó el último enfrentamiento y el empate más dulce de todos; el 0-0 en la final de 2015, que derivó en la definición por penales y la única consagración de la selección chilena en el certamen continental.