Las cinco polémicas que encendieron la fase de grupos de la Copa América
La Agencia EFE puso en evidencia las falencias del torneo que se juega en Estados Unidos.
La Agencia EFE puso en evidencia las falencias del torneo que se juega en Estados Unidos.
Un torneo 'bendecido' por un pastor evangelista, el estado de las canchas, el racismo en las redes, las sanciones a los entrenadores y los errores arbitrales que no corrigió el VAR son las cinco polémicas que marcaron la fase de grupos de la edición 48 de la Copa América.
La insólita bendición del torneo la impartió Emilio Agúero Esgaib, un pastor evangélico ultraconservador y cercano al presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, desde el centro de la cancha del Mercedes Benz Stadium y en plena ceremonia de inauguración.
Como la prohíbe expresamente cualquier manifestación política o religiosa, el debate en las redes estuvo servido.
"Hace siete meses que sabemos que tenemos que jugar acá y cambiaron el césped hace dos días". Lionel Scaloni abrió la veda sobre el estado de las canchas ya desde el primer partido. Le siguió un día después, el seleccionador de Chile, Ricardo Gareca, que denunció un terreno de juego seco y estrecho.
La sustitución del césped sintético por natural, que provocó que las canchas estuviesen irregulares, y las medidas de unos campos hechos, principalmente, para el fútbol americano fueron otra fuente de polémica.
La Conmebol, que aseguró que se optó por unas medidas estándar 100x64 para unificar, atribuyó a una "percepción estética por parte de los jugadores", las quejas sobre el estado de los terrenos de juego.
Primero fueron ataques racistas en redes sociales al canadiense Möise Bombito, por una dura entrada a Messi.
Luego las denuncias de los jugadores estadounidenses y posteriormente la de la propia Conmebol a la federación chilena por los insultos racistas de sus hinchas en redes a jugadores canadienses. Hasta en dos ocasiones, la Confederación Sudamericana sacó comunicados oficiales rechazando estas acciones.
Una norma que pocos conocían, o que no se aplicaba de forma tan rigurosa, provocó la suspensión de cuatro seleccionadores, que tuvieron que ver el partido desde el palco.
Lionel Scaloni (Argentina), Ricardo Gareca (Chile), Fernando Batista (Venezuela) y Marcelo Bielsa (Uruguay) fueron sancionados porque sus equipos se reincorporaron tarde al terreno de juego tras el descanso.
Los técnicos denunciaron la gran distancia que hay en muchos casos entre el campo y los vestuarios, lo que en palabras de la Conmebol no sirve como excusa.
La situación ha creado psicosis en los equipos, que viven pendientes del cronómetro. "A los once minutos, salimos corriendo al campo para no perder a nadie en este camino", declaró el centrocampista brasileño Bruno Guimaraes.
En el fondo, subyace si la aplicación estricta de las normas 104 y 145 del reglamento de la competición no tiene más que ver con el minutaje que exigen los contratos televisivos en Estados Unidos.
5.- Errores arbitrales que no corrigió el VAR
Como todo torneo que se precie, la polémica arbitral formó parte del paisaje, pero en esta ocasión avivó el debate la intervención del VAR para validar las decisiones del árbitro en situaciones que parecían claramente al revés, como no haber expulsado al canadiense Möise Bombito por agredir a un jugador chileno, haber concedido un gol a Uruguay ante Estados Unidos que parecía claro fuera de juego, o al contrario, anular un tanto que parecía válido a Colombia frente a Brasil.
Ante tanta polémica, el ex árbitro mundialista Javier Castrilli publicó en su cuenta de X: "El arbitraje de la Copa América es un 'relato', solamente creíble por quienes en Orlando disfrutan de la magia de Disney...".