El delantero aseguró que Universidad Católica fue un gran rival y que la clave fue no bajar los brazos.
Aseguró que es una gran responsabilidad mantener la ilusión para Peñarol en la Copa Libertadores.
Con gran tranquilidad se tomó el delantero de Peñarol, Juan Manuel Olivera, la derrota por 2-1 de Peñarol a manos de Universidad Católica por cuartos de final, resultado que le dio el paso a los charrúas a semifinales, y afirmó que el equipo va paso a paso y que están conscientes de la ilusión que genera estar en la ronda de los cuatro mejores, tras 24 años de ausencia.
El goleador afirmó que "jugamos ante un gran equipo, que había hecho una muy buena Copa, y jugando mejor que en Montevideo, por momentos estábamos complicados, pero pudimos ajustar en una jugada las ocasiones que habíamos creado y gracias a Dios pudimos meterla adentro, en un juego fuerte, pero leal y ante un gran equipo como la UC", resumió.
Pese a que estuvieron a pocos minutos de llegar a la ronda de los penales, el ex azul afirmó que la confianza "nunca la perdimos, yendo 2-0 abajo seguimos jugando igual contra un gran equipo, que por momentos nos tuvo a mal traer, pero nunca cambiamos. No bajamos los brazos y confiando que seguíamos teniendo chances" para clasificar a semifinales.
Respecto a estar en la ronda de los cuatro mejores de la Libertadores, Olivera aseguró que "da mucha felicidad y mucha responsabilidad también, pues sabemos que esto sigue generando ilusión a la gente y Dios quiera nosotros podamos seguir manteniéndola dentro de la cancha", luego de más de dos décadas de no llegar a esta fase en el certamen continental.
Aunque Peñarol se acerca al objetivo, el charrúa afirmó que aún "no soñamos con la Copa, sino que con tener una gran semifinal, estar a la altura y superar a otro gran rival que es Vélez Sarsfield, que ha venido de menos a más en la Libertadores y que tiene muy buenos jugadores, en otro obstáculo más para mantener la ilusión", finalizó.
