Resumen 2015: Escándalos de corrupción y violencia golpearon con dureza la imagen del fútbol chileno
Sergio Jadue se vio envuelto en el capítulo más oscuro en la historia de la ANFP.
Las barras bravas protagonizaron varios sucesos lamentables.
Sergio Jadue se vio envuelto en el capítulo más oscuro en la historia de la ANFP.
Las barras bravas protagonizaron varios sucesos lamentables.
Este 2015 fue el año más oscuro fuera de la cancha en el fútbol chileno, con relación a los nexos del ex presidente de la ANFP, Sergio Jadue, con el escándalo de corrupción en las altas cúpulas de la FIFA y la Conmebol, además de una serie de episodios de violencia en los estadios.
El 27 de mayo la Fiscalía de Estados Unidos, con la implacable Loretta Lynch a la cabeza, aseguró que el en ese entonces timonel del balompié chileno, recibió sobornos por los derechos de la Copa América, por parte de la empresa Datisa, cuando en Suiza ya habían sido detenidos los primeros dirigentes. Jadue se desmarcó e incluso sostuvo que los que cometieron ilícitos "deben pagar".
El dirigente, reelecto como segundo vicepresidente de la Conmebol en marzo, intentó mostrar a través de distintos documentos que estaba limpio y se encontró con un ambiente perspicaz en el Consejo de Presidentes, desde donde algunas voces pedían que dejara en claro que nada tenía que ver con el escándalo.
En ese momento el Servicio de Impuestos Internos y el Ministerio de Justicia comenzaron a seguir con mayor atención lo que sucedía en la ANFP, mientras los presidentes de clubes pedían mayor claridad al respecto, que buscaron a través de auditorías externas, una de ellas a cargo del ex contralor de la República, Ramiro Mendoza.
Previo a la disputa de la Copa América en nuestro país, el timonel de la FIFA, Joseph Blatter, presentó su renuncia al verse involucrado en el escándalo y Jadue dijo sentirse sorprendido por la decisión del suizo.
En tanto desde la selección chilena, el técnico Jorge Sampaoli sacó la voz y afirmó que su tarea no era respaldar a nadie, en medio del ambiente por el cual atravesaba la ANFP. Incluso la Comisión de Deportes de la Cámara de Diputados citó al timonel del fútbol nacional para que declarase sobre los sobornos, mientras Jadue sostenía el 4 de junio que "si hubiese algo del informe del FBI que me afecte, me habría ido".
En septiembre el golpe que recibió la conducción del fútbol local llegó por parte de la Justicia, que determinó que los sueldos percibidos por los dirigentes eran ilegales, pues la entidad es una organización sin fines de lucro. Pero las primeras auditorías a las cuentas de Jadue no encontraban irregularidades y el directivo sostenía que Blatter debía irse si era "responsable".
El mes más álgido fue noviembre. El lunes 9 se comenzó a especular con un viaje de Jadue, quien supuestamente dejó el país para declarar por el caso sobornos; luego, los medios apuntaban a que éste había presentado su renuncia, lo que fue negado por la ANFP y por el propio aludido, que explicaba la situación de esta forma:
El 12 de noviembre el calerano adujo problemas de salud y se ausentó del partido en que Chile igualó 1-1 con Colombia, mientras el 17, cuando la selección caía con Uruguay en el Estadio Centenario, tomó un avión con rumbo a Estados Unidos. En el momento dijo que iba de vacaciones "un par de meses" con sus hijos. Así se puso fin a su ciclo en la ANFP.
En Miami recibió un trato especial en el Aeropuerto y luego se supo que las verdaderas razones de su viaje fueron sus intenciones de acogerse a asumir su responsabilidad para evitar la acusación por parte de la Fiscalía y enfrentar los cargos. Además, quedó en libertad bajo fianza.
Con el Gobierno aún preocupado por la situación en la ANFP, se amenazó incluso con perder la personalidad jurídica en el caso de impedir el acceso a la información solicitada por dos cargos que lo acusan de conspiración de crimen organizado y conspiración de fraude electrónico".
Finalmente, el 3 de diciembre se supo que Sergio Jadue aceptó su responsabilidad, pues según se reveló "junto con otros, conspiró para usar sus posiciones dentro de la Conmebol para participar en un esquema que implicó la solicitud, oferta, aceptación, pago y recepción de pagos ilegales y sobornos". Conocerá su sentencia el 17 de julio.
Sin el ex dirigente en nuestro país, se comenzaron a revelar una a una las anomalías en contratos y préstamos sin autorización del Consejo a algunos clubes e incluso un doble contrato con el cuerpo técnico de la selección chilena, al que le pagaron los premios correspondientes a la Copa América a través de sociedades establecidas en las Islas Vírgenes Británicas.
De momento Arturo Salah y Pablo Milad se disputan el puesto que Jadue dejó vacante, en una elección que se realizará el 4 de enero.
Violencia
El fútbol nacional además tuvo otros serios problemas con la violencia entre hinchas, que llegó a su punto más álgido el 13 de diciembre cuando debía disputarse la última fecha del Torneo de Apertura. El duelo entre Santiago Wanderers y Colo Colo fue suspendido por bochornosos incidentes en el Estadio "Elías Figueroa". El episodio puso en duda la real utilidad del Plan "Estadio Seguro".
Grupos de hinchas de ambos elencos entraron hasta la cancha para enfrentarse, razón por la que el juez, Enrique Osses, tomó la decisión de iniciar el compromiso. En cuanto a la autoridad, demoró al más de lo necesario en ingresar a resolver el problema. Ese no fue el único hecho que empañó el año.
En julio las reyertas fueron en el Estadio Sausalito entre hinchas de Everton y Santiago Wanderers y en el Estadio Fiscal de Talca que tuvo como protagonistas a simpatizantes de Rangers y Universidad de Chile.
Además, el 18 de abril en el Estadio Monumental un grupo de hinchas de Colo Colo ingresó hasta el borde de la cancha con armas, en el partido ante Universidad Católica.
Sin embargo el peor capítulo fue el 13 de diciembre, cuando los "albos" no pudieron disputar el partido que les significaría el título debido a los incidentes, tras lo cual el Gobierno aún trabaja en dar con la totalidad de los responsables: