Cobreloa, el grande del norte que desciende por primera vez

Cobreloa descendió a la Primera B del Torneo Nacional por primera vez en sus 38 años de historia. Desde su fundación en 1977, en Calama jamás vivieron una situación similar. Su coeficiente de rendimiento sumadas las temporadas 2013-2014 y 2014-2015 contribuyó a que el el equipo "minero" quedara en una incómoda posición y finalmente perdiera la categoría, luego que la Segunda Sala del Tribunal de Disciplina lo sancionara con resta de tres puntos.

Cobreloa se fundó el 7 de enero de 1977 después de desmantelarse el club Deportes Loa del fútbol amateur. Nació debido al interés de dirigentes deportivos de Calama y Chuquicamata, empresarios y autoridades, por otorgarle a los trabajadores de Codelco un medio de esparcimiento.

El mismo año debutó en la Segunda División, finalizando en la cuarta plaza en la temporada y tuvo la opción de jugar la liguilla de ascenso, que finalmente logró tras superar a Malleco Unido en el último duelo.

Al siguiente año, ya en la máxima categoría del fútbol chileno, dio la sorpresa consiguiendo el segundo lugar, detrás del campeón de ese año, Palestino. Su gran temporada fue una antesala a lo que sería la década de oro del club naranja.

Entre 1979 y 1985, Cobreloa logró un récord en Chile alcazando un invicto como local de 91 encuentros, siendo la mejor estadística continental de un club sudamericano. En 1980 los loínos se consagraron campeones por primera vez, tras un gran un gran campeonato comandado por figuras con Oscar Wirth, Héctor Puebla y Víctor Merello, todos dirigidos por Vicente Cantatore.

El trofeo permitió que pudieran acceder por primera vez a la Copa Libertadores, donde rectificaron su gran momento en 1981 con el subcampeonato continental tras ser superado por Flamengo en una excelsa final de tres partidos jugados en Río de Janeiro (derrota 1-2), Santiago (triunfo 1-0) y en un campo neutral, que fue el mítico Estadio Centenario de Montevideo (caída 0-2).

En 1982, Cobreloa volvió a llegar a la ronda decisiva del certamen internacional inclinándose por 0-1 ante Peñarol en el Estadio Nacional en el último minuto, después de igualar 0-0 en el cotejo de ida disputado en la capital uruguaya. A pesar de la dolorosa caída, el plantel decidió enfocarse en la obtención del torneo nacional. La convicción del equipo fue tan grande que lograron su objetivo y alzaron su segunda corona, siempre con Cantatore como DT.

Tres años después llegó la tercera estrella, con Jorge Toro en la banca, en una estrecha definición con Everton de Viña del Mar, que finalizó a solo un punto de diferencia de los naranjas. En 1986, Cobreloa pudo colocar en su estante por primera vez el galardón de la Copa Chile, tras una reñida victoria sobre Fernández Vial.

La celebración se demoró dos años en retornar a Calama, cuando alzó su cuarto trofeo, tras una lucha ante un clásico rival, Cobresal. Los dirigidos por Miguel Hermosilla levantaron la corona frente a Colo Colo, al que derrotaron por 1-0 para cerrar la década dorada para los loínos.

En 1992 y después de dos años desastrosos para los "mineros", consiguieron su quinto título en el Campeonato Nacional, entrenados por José Sulantay. Con figuras como Jaime Vera, Fernando Cornejo y Marco Antonio Figueroa, impidieron el tetracampeonato de Colo Colo, relegándolo al segundo lugar.

Cobreloa no logró más títulos en los años 90, pero cosechó participaciones en la extinta Copa Conmebol en 1995 y 1996 siendo eliminados en ambas ocasiones por Rosario Central, en cuartos y octavos de final, respectivamente. El año siguiente la liga de fútbol se dividió en Apertura y Clausura. En aquella época, Carlos Rojas fue el entrenador naranja, que consiguió un quinto lugar en cada torneo.

Finalmente en 1999, Arturo Salah tomó las riendas en la banca y logró clasificar al equipo después de ocho años a la Copa LIbertadores, donde fue eliminado en primera ronda en una paupérrima actuación.

Tras la fatídica y fugaz participación en la Libertadores, Cobreloa empezó con el pie izquierdo el nuevo milenio. En el torneo nacional logró un segundo lugar que a la larga contribuyó en mantener a los loínos en la parte alta del torneo y jugando los campeonatos internacionales.

En 2002, el club recibió un duro golpe tras la victoria de Colo Colo en Calama, después de 25 años sin derrotas ante los albos en casa, y quedó eliminado del Torneo de Apertura, una derrota que caló hondo en la fanaticada naranja.

Pero la revancha llegó en 2003, considerado por muchos hinchas como el "Año Naranja". Luego de 11 años, Cobreloa volvió a bajar una estrellar tras superar en la final a su adversario favorito, el "cacique", con la gran participación de figuras como José Luis Díaz, Patricio Galaz, Nelson Tapia y Rodrigo Meléndez, entre otros.

En el semestre siguiente llegó a la banca el uruguayo Luis Garisto, que colaboró para lograr el bicampeonato, con una victora por 2-1 sobre Colo Colo en el repleto Estadio Monumental. Un golpe en la cara a los albos.

Todo pareció indicar que Cobreloa iba a lograr el tricampeonato en 2004. Sin embargo, Universidad de Chile se quedó con la definición desde los lanzamientos penales en el cotejo decisivo por el Torneo de Apertura y desmoronó el proyecto del DT Fernando Díaz.

A pesar de un inicio dudoso en el Clausura de ese año, Cobreloa logró sacar adelante un difícil campeonato y accedió por cuarta vez consecutiva a una finalísima; esta vez frente a Unión Española.

De la mano de Nelson Acosta los "mineros" alzaron su último trofeo a finales de 2004 tras ganar 3-1 en el Estadio Santa Laura en el cotejo de ida e igualar 0-0 en Calama.

En 2005 una serie de reveses en la Copa Libertadores, y los continuos cambios en el mando técnico, configuraron una mala campaña.

Fue en 2008, con Gustavo Benítez como estratega, cuando los loínos vivieron su hasta entonces peor campaña desde su llegada a profesionalismo, finalizando en la decimoquinta posición. Tras el despido del DT paraguayo, arribó un conocido: Marco Antonio Figueroa, que le dio un nuevo aire y logró salvarlo del descenso.

Desde ese año, Cobreloa empezó a mostrar deficiencia en su plantel y no lograba el mismo rendimiento final en los campeonatos locales. Con el inicio de la nueva década los naranjas sufrieron bastante. En 2011 retornó el galardonado entrenador, Nelson Acosta, que colaboró en darle un buen Clausura llevándolos a un subcampeonato tras caer con Universidad de Chile, pero el equipo no pudo mantener su buen juego en los siguientes partidos.

Durante 2013, el Estadio Municipal de Calama, que oficiaba como el recinto de los "mineros", fue cerrado pensando en su remodelación, por lo que debieron defender su calidad de local en el Estadio "Luis Becerra Constanza" de la ciudad nortina.

El descenso de Cobreloa empezó a concretarse en 2014, cuando la ANFP decidió un nuevo sistema de rendimiento para indicar los clubes que bajarían a la Primera B según un promedio entre los partidos jugados y los puntos obtenidos. Ese año fue el peor en su historia, tras la pésima campaña de 2008, con la dirección de Jorge García.

La cesión del DT produjo que Marcelo Trobbiani llegara a colaborar en la emergencia, pero la estadía del argentino duró hasta la quinta fecha del Apertura. Su hijo Pablo se encargó solo por dos jornadas, hasta la definitiva llegada de Fernando Vergara. El estratega nacional solo consiguió dos triunfos en lo restante del campeonato y el cuadro naranja finalizó en la última posición con tan solo 11 puntos.

Figueroa retornó con la ilusión de salvar a Cobreloa en el Torneo Clausura. Los resultados empezaron a darse y a pesar de llegar a la última fecha con opciones de evitar el descenso, el club recibió la noticia que tres de sus unidades serían restadas tras la denuncia de Ñublense y Audax Italiano, que alegaron que  la participación del entrenador ayudante, Alejandro Hisis, rompía el reglamento de la ANFP, argumentando que un miembro del cuerpo técnico no puede participar con diferentes equipos en un mismo campeonato. Hisis antes estuvo  en el cuadro de Chillán cuando Ivo Basay era el DT.

Tras un primer rechazo de la Primera Sala del Tribunal de Disciplina y la posterior apelación de los clubes denunciantes, la Segunda Sala falló en contra de Cobreloa.

Así, tras 37 años, el elenco nortino retornará a la segunda categoría profesional, por primera vez como descendido, y deberá luchar por la oportunidad de regresar a la División de Honor, con el cartel de ser el club de provincia con la mayor cantidad de títulos (8).