El médico contó detalles de la intervención a la que se sometió el "Chano".
El ex futbolista puede ser dado de alta en las próximas 48 horas.
El doctor Rubén Lamich, jefe de servicio de cardiología de la Clínica Santa María, reveló este miércles detalles de la intervención a la que se sometió el ex futbolista Lizardo Garrido, quien ingresó de urgencia al recinto esta madrugrada.
"El paciente Lizardo Garrido ingresó hoy en la madrugada al servicio de urgencia de la Clínica Santa María porque presentaba un cuadro de dolor torácico. Fue evaluado por los especialista de urgencia, se le realizaron todos los exámenes de rigor y finalmente se llevó al laboratorio para la realización de una ecografía que demostró la presencia de una arteria de su corazón que estaba obstruida", relató el especialista.
El médico agregó que "de forma inmediata él fue sometido a un procedimiento denominado angioplastía que intenta abrir la arteria y plantar una prótesis para que vuelva a pasar la sangre de forma adecuada hacia su corazón. El toleró perfectamente el procedimiento, luego fue trasladado a a la unidad coronaria. Se encuentra en este momento en fase de recuperación y está estable sin dolor en el pecho y siendo vigilado. Si la evolución persiste de esta forma y no hay complicaciones, él podría ser dado de alta en las próximas 48 horas".
Sobre los motivos que provocaron este problema en el "Chano", Lamich dijo que "este es un fenómeno que está muy ligado a lo que nosotros llamamos los factores de riesgo coronarios. Es decir, la hipertesión, la diabetes, el colesterol elevado, al sedentarismo, al estrés y a los antecedentes familiares. En el caso concreto de Lizardo, él es una persona sana. Como ustedes saben él fue un gran futbolista, una persona sana que hasta el día de hoy hace actividad física, por lo que los factores de riesgos no son la causa de esto. Pero hay casos en los que sin tener factores de riesgo, los pacientes pueden presentar igualmente obstrucción de sus arterias. No es lo habitual".
El doctor detalló a su vez que "esto es lo que llamamos nosotros un síndrome coronario agudo, que no llegó al infarto agudo. Es decir, él no ha presentado daño miocárdico o lo que llamamos necrosis miocárdica. Pero es un cuadro que va camino a eso y que intervinimos antes de ocurriera un daño en su corazón".
Sobre lo favorable que fue su estado físico para que esta condición no pasara a mayores, el especialista afirmó con optimismo que Garrido "es una persona sana, tenía afectada solo una de las arterias que se ha podido cerrar por lo que nosotros esperamos que él tenga un buen pronóstico a futuro".
