Pablo Guede: Una cosa es estar triste y otra tirar la toalla
Pese a que no dependen de ellos, el técnico albo cree que aún pueden ser campeones del Clausura.
Pese a que no dependen de ellos, el técnico albo cree que aún pueden ser campeones del Clausura.
El técnico de Colo Colo, Pablo Guede, comentó este jueves las esperanzas que mantiene el plantel albo de cara a la última fecha del Torneo de Clausura, instancia donde deben esperar un tropiezo de Universidad de Chile y vencer a Cobresal para coronarse.
"Si no tuviéramos esperanza nos hubiéramos ido de vacaciones. Nosotros tenemos que ganar nuestro partido y después ver", dijo el entrenador en conferencia de prensa tras la práctica en el Estadio Monumental.
"Nosotros tenemos que poner toda nuestra energía en tratar de ganarle a Cobresal, y aunque sabemos que no depende de nosotros, es la realidad. Faltan 90 minutos y puede pasar cualquier cosa. No hay más vuelta que darle", añadió.
"Vamos a llegar bien. Les dije a los chicos que este partido carece de importancia táctica y se tiene que jugar con el corazón", indicó en relación al duelo a disputarse el sábado a las 15:00 horas en La Serena.
"Una cosa es estar triste, pero otra cosa es tirar la toalla. Nosotros no nos vamos a entregar. Yo lo tengo claro y los jugadores lo tienen claro", avisó Guede, quien evitó referirse a su futuro, pese a que el presidente de Blanco y Negro, Aníbal Mosa, avisó el miércoles que respalda plenamente al DT.
"No sé si tengo el apoyo unánime del directorio. Pero te digo la verdad, eso no me preocupa", dijo.
"El lunes me voy a reunir con Aníbal. Tendré todo el domingo y la mañana del lunes para pensar en lo que viene", añadió.
"Este no es momento para hablar de refuerzos ni de bajas antes de un partido tan importante", complementó al ser consultado respecto a si ya está analizando nombres de cara al Torneo de Transición.
Guede también se refirió a la opción de incentivos en estas instancias: "Estoy súper convencido de que es un partido tan emotivo para ellos y nosotros, que estas cosas carecen de importancia", comentó.
"Uno trabaja para darle alegría a la gente y, cuando no se la das, es un dolor jodido. No sé si el peor, pero te jode, te jode mucho. No te lo puedes sacar de la cabeza. Apoyaron hasta que pitó el árbitro y sacaron toda su ira con toda razón. Y eso duele", añadió.
"Tengo muchas ganas de que llegue el sábado, de dar vuelta esta situación. Yo ante la adversidad me rebelo", cerró confiado.