Las amenazas de los fanáticos de Pumas para que las Aguilas no usen su estadio dejaron en incertidumbre el recinto en el que se jugará el próximo 26 de octubre.
La amenaza de violencia contra sus hinchas llevó este miércoles a América de México, elenco de los chilenos Ricardo Rojas y Reinaldo Navia, a replantear la sede para su partido como local ante Vélez Sarsfield de Argentina, por los cuartos de final de la Copa Sudamericana.
"La elección del Estadio Olímpico podría venirse abajo", explicó América en un comunicado después que algunos fanáticos de Pumas de la UNAM amenazaron con un comportamiento violento contra los seguidores americanistas si este equipo juega ante Vélez en su recinto deportivo.
América precisó que tuvoo que considerar nuevamente jugar como local en los estadios Azul en la capital mexicana; en el Cuauhtémoc de Puebla (125 kilómetros al este) o el Corregidora de Querétaro (200 kilómetros al norte).
Las Aguilas pretenden jugar en el Olímpico debido a que no puede jugar en el Estadio Azteca, su sede habitual, por una suspensión de tres partidos que decretó la Confederación Sudamericana de Fútbol por una pelea ante Sao Caetano de Brasil en la Copa Libertadores del 2004
El Estadio Azul, sede del Cruz Azul, se perfila como la mejor solución para América, debido a que busca evitar los viajes para sus jugadores.
La elección del Estadio Olímpico como su sede para el partido ante el equipo argentino, provocó que un grupo fanáticos de Pumas UNAM amenazara con "cazar" seguidores de América, un equipo con el que hay una gran rivalidad.
"Sí a la violencia, el estadio universitario no es un gallinero", decía una pancarta portada por los seguidores de Pumas.
América recibirá a Vélez Sarsfield el próximo 26 de octubre en el partido de ida de los cuartos de final de la Copa Suramericana. (EFE)
