La azafata Ximena Suárez arribó a Santa Cruz en la madrugada de este lunes.
"Hasta ahora no lo puedo creer", declaró.
La única mujer que sobrevivió al accidente del vuelo de la aerolínea Lamia, la azafata boliviana Ximena Suárez, solidarizó con las víctimas del club Chapecoense de Brasil en el siniestro tras llegar en la madrugada de este lunes a su país en un vuelo comercial.
"Mi más sentido pésame a toda la familia de Chapecó, a sus jugadores por esta gran tragedia", dijo Suárez en declaraciones a los medios, tras salir del avión asistida y en una silla de ruedas al llegar a la ciudad boliviana de Santa Cruz (este).
La tripulante del avión siniestrado llegó a Santa Cruz en un vuelo de la compañía Avianca procedente de la ciudad colombiana de Medellín alrededor de la 01.50 horas local (04.50 GMT).
La clínica Somer de Rionegro, en el noroeste de Colombia, dio el alta médica a la azafata el viernes pasado.
Suárez, que es natural de Santa Cruz y tiene dos hijos, fue la última superviviente en salir de ese centro médico, donde seguía un tratamiento de fisioterapia para permitir su regreso a Bolivia.
"Estoy muy feliz, gracias a todas las personas que oraron por mí, es un montón de emociones, y hasta ahora no lo puedo creer", dijo la azafata tras reencontrarse con sus familiares.
También sobrevivieron al accidente que dejó 71 víctimas el técnico de vuelo boliviano de Lamia Erwin Tumiri, los futbolistas brasileños Alan Ruschel, Jackson Follman y Helio Zampier Neto, así como el periodista brasileño Rafael Henzel.
