El ex delantero argentino firmó un papel en blanco, que fue convertido en un pagaré.
Logró detener el ilícito mediante una acción judicial.
El ex delantero Gabriel Batistuta evitó que se realizara una estafa que se propició luego de que firmara un autógrafo en un papel en blanco, que posteriormente fue convertido en un pagaré por 320 mil pesos argentinos (unos 31 millones de pesos).
El otrora artillero del combinado trasandino recurrió a la Justicia para que los presuntos autores fueran procesados por "estafa procesal en grado de tentativa en concurso ideal con el uso de documento privado falso", según informó InfoBae.
De acuerdo al medio, citando a la agencia DyN, la Cámara del Crimen consideró que "las constancias incorporadas hasta el momento al legajo permiten afirmar tanto la materialidad de los hechos denunciados como la responsabilidad de Mabel Lamelas y Eduardo Roberto Sanz", quienes son sindicados como los responsables.
El abogado del ex futbolista, Andrés Gil Domínguez, explicó que a partir de su firma estampada en un papel en blanco se habría "confeccionado un pagaré a favor del imputado cuyo texto fue impreso sobre ese mismo papel por la suma de 320 mil pesos", donde quedó consignada la firma de Batistuta como deudor, añadiéndose su nombre, documento de identidad y domicilio".
