El capitán de Bayern Munich no se confía en el 4-0 de la ida.
Aseguró que jugará como siempre, pese a estar al borde de la suspensión por amarillas.
Schweinsteiger en acción ante Messi en el duelo de ida.
El capitán de Bayern Munich, Bastian Schweinsteiger, aseguró que, pese al 4-0 que su equipo tiene de ventaja del partido de ida de la semifinal de la Liga de Campeones, Barcelona "tiene el orgullo herido", por lo que en el partido de este miércoles será un rival "muy peligroso".
En la rueda de prensa previa al duelo que decidirá el segundo finalista de la competición europea, el mediocampista alemán reconoció que los azulgrana son capaces de dar vuelta un marcador tan adverso.
"Está claro que por el resultado de la ida hemos abierto la puerta, pero aún no hemos pasado por ella. Va a ser un partido difícil de resistir. Son pocos los equipos que han resistido en el Camp Nou. El Barça tiene el orgullo herido y eso lo hace muy peligroso", advirtió.
Y añadió: "Tenemos una buena oportunidad, estamos concentrados y ya veremos qué puede pasar. El Barça es capaz de hacer un partidazo y tenemos que estar atentos".
Schweinsteiger, que si recibe una tarjeta amarilla en el Camp Nou se perdería la hipotética final de Wembley, señaló que este hecho no cambiará su manera de jugar.
"Se aborda el partido con normalidad. De la misma manera de siempre, claro que no hay que hacer faltas, pero hay que disputar los duelos como Dios manda porque no hay nada decidido. Preparamos el partido como siempre", explicó.
El choque de vuelta entre Barcelona y Bayern Munich se jugará a las 14:45 horas (18:45 GMT) de este miércoles.
