El astro brasileño entró a rehabilitación en los últimos días.
Su asesor dijo que la situación "no es nada preocupante".
El ex futbolista e ídolo brasileño Edson Arantes do Nascimento, Pelé, pasa por un proceso de rehabilitación, tras la operación a una de sus caderas el pasado diciembre, según informó este viernes su asesor José Fornos Rodrigues, quien afirmó que la situación clínica "no es nada preocupante".
Pelé fue operado "con éxito" el pasado 3 de diciembre en Nueva York y, tras pasar tres días ingresado, se trasladó a su domicilio neoyorquino, donde comenzó un tratamiento de fisioterapia que se extenderá dos meses, dijo Rodrigues a EFE.
El exfutbolista fue operado hace tres años para la inserción de una prótesis en el fémur de la pierna derecha y en 2015 sintió "pequeños" dolores en la zona donde fue realizada la cirugía.
Los médicos detectaron que el acetábulo -cavidad del hueso coxal en la que se articula la cabeza del fémur- estaba suelto y consideraron que necesitaba ser reajustado, por lo que Pelé aprovechó una visita a Estados Unidos para realizar la operación.
"No es nada preocupante, sólo un ajuste en el acetábulo que ahora está firme y, si Dios quiere, en breve él estará en forma", apuntó Rodrigues por email tras ser consultado por EFE.
Tras la operación, Pelé aprovechó su estancia en Estados Unidos para pasar las fiestas navideñas en Nueva York y está previsto que regrese la próxima semana a Brasil, donde continuará con los trabajos de fisioterapia.
"Él bromea diciendo que quiere prepararse para jugar en los Juegos Olímpicos ya que ahora pueden jugar 3 futbolistas con más de 23 años que sean profesionales", agregó el asesor.
'Pelé', el mejor jugador de la historia de Brasil, ha estado hospitalizado varias veces en los últimos años debido a un problema urinario y el pasado año fue operado de la próstata en un hospital de Sao Paulo.
Llegó a permanecer 16 días ingresado por una infección urinaria que le surgió después de haber sido intervenido quirúrgicamente de cálculos renales.
El 'rey' del fútbol sólo tiene un riñón, puesto que el otro le fue extirpado en los años 70, cuando aún era jugador profesional y militaba en el New York Cosmos.
