Matías Defederico reconoció amenazas de muerte contra él y su familia
A su esposa, Cinthia Fernández, le enviaron mensajes intimidatorios.
Esto debido a una deuda que espera cobrar al club Independiente de Avellaneda.
A su esposa, Cinthia Fernández, le enviaron mensajes intimidatorios.
Esto debido a una deuda que espera cobrar al club Independiente de Avellaneda.
El atacante de San Marcos de Arica Matías Defederico reconoció que él y su familia recibieron amenazas de muerte por parte de supuestos hinchas de Independiente de Avellaneda, debido a una deuda que espera cobrar al club en que militó entre el 2011 y 2012.
"Es una situación fea, más que nada por la familia, por ser víctima de estas amenazas como contó mi señora -Cinthia Fernández-. Me levanté ayer y me dijo 'me están llamando, amenazando'", declaró en TyC Sports.
"A mí me mandaron unos Whatsapp medio fuertes, tuve que cambiar el número de teléfono, pero es parte del fútbol y de la sociedad que estamos viviendo en Argentina", agregó el ariete.
La modelo Cinthia Fernández publicó en Twitter una serie de mensajes acusando las amenazas, que aparecen luego que Defederico pidiera la quiebra del club argentino, a raíz de un monto que le adeudan desde su último paso por dicha institución.
En virtud de ello, Fernández señaló que en la intimidación le ofrecieron "balas para vos y tu familia", por lo cual anunció que junto a su cónyuge "iniciaremos acciones legales, ya que tenemos todos los números telefónicos y las amenazas grabadas en nuestros teléfonos".
Por su parte Defederico explicó que el asunto con el conjunto rojo "lo está manejando mi abogado, la sentencia está firme y el juicio está ganado. El año pasado la dirigencia nueva de Independiente llamó a mi abogado para juntarse y tratar de arreglar lo de la deuda, quedaron de llamarnos y no lo volvieron hacer. Fue en el 2011, hace cinco años estamos con este tema".
Esta es la segunda oportunidad en que Defederico Defederico inicia acciones legales contra Independiente, luego que a inicios de 2012 embargara a la institución que le pagó con "cheques rebotados".