Se cumplió la primera jornada del último major del año.
Los favoritos Tiger Woods y Phil Mickelson marchan en el 50º lugar.
Adam Scott metió cinco birdies consecutivos.
La imagen de Oak Hill, la sede del último "Grande" del año, como un campo monstruoso, de garras largas y afiladas, quedó en entredicho por los trabajos del estadounidense Jim Furyk y el australiano Adam Scott, ambos con 65 golpes (-5) y los mejores en el comienzo del US PGA Championship en Rochester (Nueva York).
Furyk, el golfista con el swing más heterodoxo del circuito, y Scott, aferrado al putter escoba que será prohibido a partir de 2016, se encargaron de desmitificar a base de birdies este recorrido, ayudados, eso sí, por la receptividad de los greenes húmedos de las lluvias.
Furyk, de 43 años y un US Open ya en su currículo, y Scott, el último Chaqueta Verde del Masters de Augusta, comenzaron la batalla en Oak Hill con la lección aprendida. Entre ambos sumaron una docena de birdies, repartida a partes iguales pero con una serie formidable por parte del australiano, que encadenó cinco consecutivos.
Sobre el rendimiento del líder mundial y el segundo del ránking, por este orden los estadounidenses Tiger Woods y Phil Mickelson, comenzaron los debates. Los protagonistas del 'Combate del siglo' cerraron con 71 golpes (uno arriba) y el mismo final nefasto: doble bogey en el último hoyo.
Clasificación de la primera jornada
