La tenista estadounidense festejó su cuarto título en Melbourne Park
Con esta victoria, además, logró el ascenso al número uno del mundo en la WTA.
La tenista estadounidense Serena Williams (2ª de la WTA) se adjudicó este sábado el título del Abierto de Australia tras vencer de forma cómoda en la final a la rusa Dinara Safina (3ª) por parciales de 6-0 y 6-3 en sólo 58 minutos de partido.
Con esta victoria, la morena jugadora norteamericana festeja por partida doble, ya que desde el próximo lunes aparecerá en el primer puesto del escalafón mundial del tenis femenino.
Lo cierto es que desde el primer punto del match disputado en la Rod Laver Arena Serena Williams le pasó por encima a su rival. Su experiencia en el circuito fue gravitante ante una jugadora eslava que pagó caro su inexperiencia en duelos decisivos, ya que se vio nerviosa e imprecisa.
Safina falló muchas veces y no logró nunca agarrar confianza ni ritmo de partido. Por el contrario, la menor de las hermanas Williams se vio muy compenetrada y eso le permitió en el primer set sumar tres rompimientos consecutivos y con un sólido nivel de juego apabulló a su rival en sólo 22 minutos.
En el segundo capítulo la representante rusa despertó de su siesta inicial y le rompió el saque a la estadounidense, dando a entender que daría pelea por dar vuelta las acciones. Sin embargo, la nueva número uno del mundo no le dio tiempo para ilusionarse, ni menos para tomar confianza ya que con dos quiebres consecutivos retomó el control del partido.
La reacción final de la hermana menor de Marat Safin fue demasiado tarde ante una intratable Serena Williams, quien supo aprovechar los errores de su rival para sumar a sus vitrinas su cuarta corona del Abierto de Australia y recuperó el número uno del mundo, tras pasar 61 semanas al frente de la clasificación WTA en 2002, 2003 y 2008.
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| La menor de las Williams celebró por cuarta vez en Melbourne. |
