El de Vitacura se mostró satisfecho con el juego desplegado ante el trasandino Schwank.
Además, celebró el hecho de ganar en la arcilla viñamarina después de largo tiempo.
La satisfacción embargaba a Paul Capdeville (102º) después de su ganador estreno en el ATP de Viña del Mar, donde dio cuenta en forma contundente del argentino Eduardo Schwank (52º), ya que estuvo en todo momento en control del partido, como lo explicó.
"Sentí que siempre estuve en control del partido, en los juegos que ganó con su saque estuve ahí peleándoselos, le devolvía todas las pelotas y esa presión que le puse dio resultado", señaló el chileno en la conferencia de prensa post partido.
"Jugué bien profundo, traté de llevarlo a mi ritmo, no traté de arriesgar demasiado, porque acá lo peor es apurarse, ya que la bola corre muy lenta y así evitar caer en los errores que cometí en otros años", agregó.
Este triunfo lo recibió de forma muy especial, ya que pudo instalarse en la segunda ronda del torneo, después de muchos años en donde se despidió en forma anticipada.
"Hace tiempo que no jugaba así en Viña, hoy (lunes) jugué a un buen nivel, pero en mi interior sentí que esto lo estoy empezando a dominar y eso me tiene bien contento y espero seguir igual, porque eso me ayudar a subir en el ranking", puntualizó el de Vitacura.
Además, para Capdeville los triunfos más valorados son los obtenidos contra rivales que están en una mejor ubicación, por la intensidad del juego, el cual pudo contrarrestar imponiendo sus términos.
"Siempre son buenos desafíos, un top 50 como Schwank es un jugador que ha ganado muchos partidos, que en arcilla ha sido muy duro, por momentos el partido fue intenso, a pesar de que cometí algunos errores por el nerviosismo. Pero sentí que pude hacer bien mi tenis y pude plantear lo que había analizado antes del partido", puntualizó el tenista nacional.
