El suizo cree que el serbio está destinado a comandar el ranking ATP.
Sin embargo, recordó que en la temporada de arcilla manda Rafael Nadal.
El suizo Roger
Federer, tercer jugador del mundo, no se mostró preocupado por haber sido desplazado del primer plano del circuito, en donde tantos años estuvo asentado, por el serbio Novak Djokovic, que le arrebató el segundo puesto del ranking ATP y al que considera un próximo "número uno" aunque recordó que la temporada de arcilla es "la especialidad de Rafael Nadal".
"Creo que Novak ha tenido una buena progresión desde el Abierto de Estados Unidos, que tuvo la ocasión de ganarlo. Perdió con Nadal pero reaccionó bien. Lo tomó de buena manera y está en muy buen momento. Ha aprovechado sus ocasiones y ha podido ganarme las últimas tres veces. Es muy bueno. Tiene muchas oportunidades para ser el número uno. Antes las tuvo y no las aprovechó. Ahora tiene más, porque está jugando muy bien", dijo Federer.
Sin embargo, el helvético recordó que ahora el tenis vive en la temporada de tierra batida. "Aquí Rafa está en su espacio y va a ser una etapa interesante y disputada", apuntó.
Sobre los próximos compromisos, en Madrid y Roma, Federer desconoce qué sucederá. "Nunca lo he hecho de esta manera, por lo que no sé como es ese reto. Cualquier Masters 1000 es difícil. Solo porque las pistas son muy difíciles y sólo gana uno. Solía ser más difícil antes, cuando eran más sets y partidos. Me gustaría ver otra vez algunos partidos como antes, a cinco sets. Es difícil este tipo de torneos tanto físicamente como mentalmente. Depende de donde estés", sostuvo,
A pesar de la escasez de éxitos en este inicio de campaña y de haber sido desplazado al número tres del mundo, Federer consideró que el arranque del año "ha sido bueno".
"Ha sido un año bastante bueno. Me siento bien. He sufrido un poco en Dubai con mi tenis, pero fue debido a las malas condiciones. En el resto creo que he jugado bien. En global creo que ha sido una buena temporada hasta ahora", destacó el suizo, que apuntaló su puesta a punto ante la llegada del curso a la superficie de arcilla.
"Desde Mónaco he entrenado duro, en gimnasio y pista. Para prepararme para Madrid, Roma, Copa Davis. Tengo que estar preparado para esto, para la tierra batida, con Roland Garros. Me siento bastante bien", insistió.
