Cecchinato logró un histórico paso a semifinales en París tras batir a Djokovic
El italiano, campeón del Challenger de Santiago, venció en cuatro sets al ex número uno del mundo.
El festejo del italiano en Roland Garros.
El italiano, campeón del Challenger de Santiago, venció en cuatro sets al ex número uno del mundo.
El festejo del italiano en Roland Garros.
El italiano Marco Cecchinato (72° del mundo), que nunca había ganado un partido de Grand Slam hasta este Roland Garros, dejó huella en la arcilla parisina con una histórica victoria ante el serbio Novak Djokovic (22°) que lo lleva a las semifinales, en las que se medirá con el austríaco Dominic Thiem (8°), que eliminó al alemán Alexander Zverev (3°).
Cecchinato, de 25 años y campeón en marzo pasado del Challenger de Santiago, venció por 6-3, 7-6 (4), 1-6 y 7-6 (11) en tres horas y 26 minutos en un emocionante último desempate en el que ganó en su cuarto punto de partido.
El siciliano se ha convertido en el primer tenista de su país en jugar una semifinal de un Grand Slam en 40 años y en el jugador con menor ránking que disputará una semifinal de un grande desde 2008 en Wimbledon.
Cecchinato comenzó arrollador, pero en el tercer set sufrió un bajón físico del que parecía que no se iba a recuperar cuando estaba 5-3 abajo en la cuarta manga. Un quiebre en el noveno juego le metió de lleno en el set.
Tampoco se desmoralizó cuando no aprovechó sus tres primeros match points en el cuarto capítulo, y acabó tendido en la pista celebrando el triunfo más importante de su carrera.
"Quizá estoy todavía soñando. Es increíble vencer a Djokovic en unos cuartos de final. Jugué un partido increíble", dijo el italiano, quien rompió a llorar de emoción.
En el dramático desempate, Cecchinato también consiguió salvar tres puntos de set a Djokovic, que hubiesen puesto el encuentro dos a dos.
Fue un cuento de hadas lo que sucedió en la cancha "Suzanne Lenglen". Un jugador que solo había ganado un título en su carrera, el de Budapest este año, doblegó a un monumento del tenis mundial, ganador de los cuatro Grand Slams.
El abanico de golpes del italiano apabulló al ex número uno mundial: un revés tan plástico como contundente, dejadas y un buena devolución. Le salían todas al chico de Sicilia.
El balcánico se quejó de molestias musculares. Primero en el cuello y luego en una pierna, aunque nada importante, como él mismo reconoció.
Djokovic estaba tan tenso que hasta celebró un error ajeno como si fuese el punto de su vida.
Con dos sets abajo, el ex número uno del mundo logró meterse en el partido con un arrollador tercer set (6-1), pero se le fue de las manos en el cuarto.