El español fue apuntado en un posible arreglo de un partido de dobles mixtos en el Abierto de Australia.
Marrero negó las acusaciones.
El tenista español David Marrero (32° del mundo en dobles) declaró que es un "poco fuerte" que lo acusen "sin pruebas" de un posible arreglo del partido mixto que disputó el pasado lunes con Lara Arruabarrena ante la potente pareja compuesta por la checa Andrea Hlavackova y el polaco Lukasz Kubot en la primera ronda del Abierto de Australia.
En ese encuentro, la dupla hispana cayó con parciales de 0-6, en 20 minutos, y 3-6, en 29'.
"Creo que me tocó a mí y la verdad es que no sé muy bien qué decir. Estoy intentando digerir lo mejor posible todo lo que se está diciendo y me está pasando. La verdad es que acusar a un jugador sin pruebas es un poco fuerte, pero estoy tranquilo y con ganas de que termine todo esto", dijo Marrero a EFE.
El deportista isleño, de 35 años, que ganó junto a Fernando Verdasco el Masters de dobles del año 2013 y que ha formado parte del equipo de la Copa Davis en tres ocasiones, aseguró que tiene la conciencia "muy tranquila" porque nunca ha hecho "nada" con relación al arreglo de un encuentro.
"Es una situación incómoda y tengo muchas ganas de que todo se acabe porque es algo que no gusta a nadie. Nunca debió darse esto y tienen que hacer algo para solucionarlo, ya que no le deseo este trance ni a mi peor enemigo", expresó.
Marrero, que se encontraba en el aeropuerto australiano de camino a Gran Canaria cuando saltó la noticia, manifestó que "siempre" es "muy profesional" y que intenta desplegar su mejor tenis en la cancha.
Según New York Times, Marrero y Arruabarrena se encuentran bajo investigación por las sospechas de arreglo de ese partido e incluso el diario norteamericano aportó un vídeo con tres puntos mal jugados por el español, al tiempo que informó de que las casas de apuestas Pinnacle Sports y Betfair se mostraron "sorprendidas" por la cantidad de dinero que se apostó a favor de la victoria de la pareja centroeuropea.
"Después del partido nos llamó el New York Times para una entrevista y nos preguntaron que si sabíamos que hubo mucho movimiento en no sé dónde. No teníamos ni idea de nada porque fue justo después del choque. Me fui al hotel a ducharme y cambiarme para ir al aeropuerto y, ahí, fue cuando las redes sociales recogen la información y me enteré", explicó Marrero.
El canario, que está en contacto con la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) y la Unidad de Integridad de Tenis (TIU), confesó que "nadie" le ha pedido revisar su teléfono móvil ni su tablet.
