Cuatro mil entradas serán destinadas para los fanáticos de O'Higgins y se venderán en Rancagua.
Las puertas del coliseo de Ñuñoa se abrirán tres horas antes del inicio del cotejo.
La Intendencia Metropolitana autorizó un aforo de 45 mil personas del Estadio Nacional para la final de vuelta entre Universidad de Chile y O'Higgins, que se jugará el próximo lunes 2 de julio a las 15:30 horas (19:30 GMT).
De las 45 mil entradas dispuestas a la venta, cuatro mil serán destinadas para los fanáticos de O'Higgins las cuales se venderán en Rancagua.
Además, las puertas del coliseo deportivo de Ñuñoa se abrirán tres horas antes del inicio del cotejo, es decir, pasado del mediodía.
El coronel de Carabineros Roberto Abarca expresó que se llegó a este acuerdo y que "se han tomado todas las medidas de seguridad tras la reunión de coordinación con el único fin de que la gente vaya a disfrutar del fútbol chileno".
Agregó que la los fanáticos rancagüinos tendrán un resguardo especial y que "lo más seguro es que nos esperemos en el peaje de Angostura y los vamos a llevar hasta el Estadio Nacional para que no tengan problemas".
