El entrenador de U. Católica lamentó la caída ante los árabes en Santa Laura.
Aseguró que deben jugar mejor el domingo para clasificar a la Sudamericana.
El entrenador de Universidad Católica, Mario Salas, lamentó la caída que sufrieron este jueves ante Palestino por 2-1, por la liguilla del Apertura, pero aseguró que la llave aún está abierta.
"La llave queda abierta, pero Palesitno nos superó. Nos dio la impresión que en la primera parte, cuando nos estábamos posicionando, nos empataron. El segundo gol de ellos se dio por un juego muy intenso, que hicieron durante la segunda etapa", dijo Salas al CDF tras el encuentro..
"Nuestro mejor momento fue después del segundo gol, donde rompimos la marca y la presión de ellos. Nos generamos chances de gol, pero no pudimos desarticular a Palestino en algunos sectores que teníamos pensado", añadió el estratega.
Respecto al duelo de vuelta, apuntó que "vamos a hacer todo lo posible. La llave está abierta, pero ante un equipo que juega muy bien en estas instancias. Tenemos que ir a buscar el partido y lograr la victoria, con mejor fineza para desequilibrar en algunos sectores".
Sobre la ausencia de Pablo Alvarez dijo que fue por "decisión técnica. Es un gran profesional y no ha tenido la chance de jugar en forma continúa como ha querido por el rendimiento de sus compañeros en ese puesto. Yo tomé la decisión hoy de poner a Sierralta, pero por temas técnicos. No hay nada que reprocharle".
"Tenemos que hacer todo lo posible. Hoy no hicimos un buen partido, pero en 72 horas debemos dar vuelta esto y revertirlo. Es el último duelo del año y del campeonato", finalizó.
