Con su particular estilo, el técnico de Santiago Morning, Hernán Godoy, analizó el triunfo en el Estadio Santa Laura sobre Universidad Católica, que a su juicio pasó por cortar las vías de juego de los cruzados, además de revelar la clave para el alza en el juego de su escuadra, tras asumir en el banco de los "bohemios".
Godoy aseguró que "es un triunfo trabajado, planificado en la pizarra, de anular a los hombres claves del equipo contrario, había que eliminar a (Milovan) Mirosevic, que es un talento, un hombre de experiencia y que pertenece a la insignia de Católica; (Jorge) Ormeño, que es un jugador táctico, funcional, y había que cortarles la comunicación futbolística", entre los que incluyó a Roberto Cereceda y Rodrigo Valenzuela.
Además de "demostrar que uno está vigente" y afirmar que está feliz por poder cumplirle al presidente del club, Miguel Nassur, analizó que "en el fútbol las oportunidades de gol hay que aprovecharlas, porque después nos estamos lamentando. Nos estábamos quedando con un empate que no era justo, pero en el fútbol hay que ser inteligente, y el equipo que intente más tenerla cerca del arco contrario va a la larga salir el gol".
Destacó que ha podido recuperar a valores jóvenes como Dagoberto Currimilla y Felipe Flores, y afirmó que "el técnico tiene que ser motivador, psicólogo, amigo, abuelo, paternalista, y cuando hay que trabajar, hay que ser nazi, o sea no perdonar al jugador que quiere sacar la vuelta. Aquí van a jugar los que corran, los que no quieran, que se queden en la casa. Y esa ha sido la clave".
Por último, destacó que los jugadores deben tener una motivación especial para no descender, ya que "tiene familia, tiene la presión de la prensa, del público y no es lo mismo jugar en Primera División, donde ganan dos, tres o cuatro millones de pesos mensuales , que llegar a Segunda División, donde sus remuneraciones van a ser muy bajas".
Preocupación en los precordilleranos
Por su parte, Milovan Mirosevic aseguró tras el duelo que "lógicamente que quedamos preocupados, porque no esperábamos tener dos derrotas seguidas, y nuestro análisis lo haremos internamente. Nos vamos tristes, porque si bien hicimos un primer tiempo bueno, en el segundo sí habíamos levantado y el partido estaba para nosotros, pero por todas las cosas que pasaron no pudimos".
Respecto al enojo con el desempeño del juez Jorge Osorio, aseveró que "me parece muy determinante, las expulsiones habrá que verlas en televisión, pero me llama la atención que en el penal ni siquiera el delantero se había dado cuenta del cobro, y se encontró con el regalito. Es una situación incómoda, no nos gusta y ya le dije todo lo que tenía que decir a Osorio dentro de la cancha".
Eso sí, reconoció que "tenemos un grado grande de responsabilidad, tenemos que mejorar un montón de cosas, hay claridad con respecto a eso, así que pienso que vamos a poder mejorarlo. Si a eso le sumamos todo lo que pasó, se hace difícil".
Agregó que "no hemos podido finalizar bien las jugadas y cuando hemos tenido un poco más de profundidad nos hemos podido encontrar con goles. Tenemos que mejorar, y rápido, porque se nos vienen los partidos importantes y hay que estar preparado para eso. Entonces, sí es preocupante".