La canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro chino, Wen Jiabao, inauguraron el domingo la Feria Industrial de Hannover, con China como invitado de honor ante lo cual han surgido protestas de grupos defensores de derechos humanos.
Merkel, en su discurso inaugural, señaló que considera que la industria alemana va por buen camino y que tiene "pocas preocupaciones" de que los productos alemanes dejen de venderse bien.
Sin embargo, la canciller advirtió que las empresas tienen que seguir esforzándose en lo relativo a la innovación y dijo que China es un ejemplo de que la competencia es fuerte en el mercado mundial, destacando que "somos socios, pero también competidores en la búsqueda de las mejores soluciones".
Wen, por su parte, dijo que la Feria tiene una gran importancia para la ampliación de las relaciones económicas entre los dos países y la calificó de "barómetro del desarrollo de la industria global".
Además señaló que el proceso de industrialización en China todavía no ha terminado y eso es algo que ofrece grandes posibilidades a empresas extranjeras.
El primer ministro chino prometió una mayor apertura de la sociedad china, facilitar el ingreso al mercado y mejorar la defensa de la propiedad intelectual.
La Feria Industrial de Hannover se extenderá hasta el 27 de abril, ocasión en donde cerca de 5.000 expositores de 69 países presentaran sus productos.